Ayer, una delegación de representantes de las asociaciones de caza lombardas fue recibida por el presidente de la Región de Lombardía Attilio Fontana. asistieron a la reunión Lorenzo Bertacchi, Giancarlo Bosio, Massimo Zanardelli y Carlo Bravo, quienes agradecen al Presidente haber dedicado más de una hora a los delicados problemas que preocupan a los cazadores lombardos y la difícil relación con la DG Agricultura. La falta de confrontación con el mundo cinegético y la subestimación sistemática de las propuestas y sugerencias técnicas y jurídicas condujo así a la adopción de actos inaceptables para los cazadores y políticamente nocivos.
Lamentablemente, desde septiembre hasta hoy tuvo que registrarse un verdadero retiro de relaciones, con una Dirección General que parecía atrincherarse más en la defensa de sus propios errores y elecciones que en la búsqueda de soluciones, por lo que no sólo la situación denunciada en septiembre, cuando se solicitaban dimisiones y renovación de competencias, sino que se en realidad empeoró, con la elaboración de actos que socavan el futuro de la caza en Lombardía. Justo lo que temían las asociaciones.
Ahora sobre la mesa hay actos fundamentales para la programación de caza que tendrá efectos inmediatos (como el calendario de la próxima temporada) y que sancionará el destino de la caza en Lombardía durante los próximos diez años, como el Plan de Caza de Fauna Silvestre, las Directrices para la gestión de los Galliformes Alpinos y regulación del mantenimiento y timbre de llamadas de cría. El Presidente ha captado bien el carácter problemático de las decisiones presentadas sólo cuando en gran parte irreversibles, ya acompañadas de dictámenes ISPRA que, sin embargo, son el resultado de lo que ha sido preparado por las Oficinas. Aunque puede resultar difícil volver a poner la barra a estribor, sólo volviendo a una comparación constructiva y cercana se puede pensar en programar y planificar de manera rentable la caza para los próximos meses y años en el poco tiempo que resta de la actual legislatura autonómica.
Y la política debe reapropiarse de su doble papel: de guía del trabajo de funcionarios y gestores y, al mismo tiempo, de intermediario. en el diálogo entre las Oficinas y los representantes de las cofradías cinegéticas. En este sentido, se esperan señales concretas en un plazo muy breve y confiamos en que el interés personal del Presidente finalmente podrá hacer un cambio. (Fuente FEDERCACCIA LOMBARDÍA)