Una gran migración. Es una migración post-nupcial para recordar la que está ocurriendo este año porque los zorzales, de forma bastante sostenida y continua, están deleitando a todos los entusiastas de la ornitología desde la última década de septiembre hasta la primera semana de octubre, habiendo alcanzado el máximo. pico en la tradicional fecha ornitológica de San Francesco, el sábado 4 de octubre, respetando la cita como sucedió para la provincia de Como donde las tradiciones populares de caza ornitológica transmiten que la fiesta de la Madonna di Alzate Brianza aparece la primera tordo de la temporada de otoño (es decir, el 8 de septiembre, como sucedió este año). Y así prosigue también el movimiento migratorio de otras especies, como la Curruca Capirotada que, en el Observatorio Ornitológico FEIN de Arosio, alcanzó la notable cifra de 1.171 anillamientos que sólo se produjeron en septiembre. No menos es el petirrojo que, ya en los primeros días de octubre, después de un comienzo silencioso, se redime con una buena migración, como ocurre con el mirlo. Luego está la presencia del Frosone y el Fringuello que se observan en buen número en Arosio como en otras zonas del norte de Italia.
A ellos se suman las primeras apariciones del Gorrión, del Siskin, ya notado en las llanuras, del Tordele y del Ala roja, observado en lo alto de las colinas. Entre los pequeños paseriformes hay que añadir el movimiento del Regulus y la excelente presencia del pequeño Luì. No es de extrañar, entonces, que algunas especies transsaharianas todavía estén presentes en el norte de Italia, como el Wheatear, el Whinchat y el Prispolone. También el estornino y la paloma torcaz comienzan a observarse en pequeñas bandadas, más o menos numerosas. Lo mismo ocurre con las Alondras de las que hemos tenido noticias de las primeras observaciones de sujetos en migración. Entre los limícolas hay una buena presencia de la Agachadiza observada en las áreas que le son agradables y hay informes de avistamientos de Woodcock en las montañas por encima de los 1.500 metros.
Evidentemente, las condiciones meteorológicas influyeron en este movimiento migratorio tras las aprehensiones de agosto, que luego se superaron a partir de septiembre. Ejemplo de ello es la actividad desarrollada en el Observatorio Arosio donde el mes que acaba de finalizar se sitúa en la primera posición en los últimos cinco años de estudio en cuanto al número de anillados, dejando sin embargo inalterado el de las especies analizadas, igual a cuarenta. .
De hecho, luego de que el sol comenzara a aparecer de manera más constante, se favoreció el excelente paso de la especie, confirmando así su buen estado de conservación, gracias a una anidación positiva que tuvo lugar en el norte del Paleártico occidental que se reconfirma como un Territorio importante para la reproducción del capitel de aves. Solo la sabiduría de una muestra inteligente puede preservar la consistencia de nuestros amigos alados, eternos viajeros del cielo.
Octubre 10 2014
Migradores ANUU