El voto de caza se ha convertido en una entidad real, con características y orígenes bien definidos, gracias sobre todo a la civilización rural frente al pensamiento metropolitano y chic radical. Según ACL, esto es solo al principio, pero se ha dado una señal clara y contundente: los ciudadanos cazadores saben unir fuerzas y de esta manera pueden afectar y modificar la resultado final en términos numéricos. Poder contar con una categoría tan compacta y con un electorado fiel es una ventaja, más aún Lombardía.
La asociación mira al futuro con confianza y atención, con la esperanza de que el nuevo consejo regional reconozca el compromiso y el resultado que acabamos de describir. Inevitablemente, comenzará desde los puntos programáticos en los que ACL ha presionado con más insistencia, a saber a pesar de la caza y el rocoli.