Un ciertamente suntuoso y acogedor banquete, el pecado se componía principalmente de caza prohibida por la ley, concretamente tordos y becadas. No terminó bien para el dueño del restaurante que tendrá que pagar la altísima factura emitida por la policía forestal. Para las autoridades esta vez no fue tan difícil descubrir el delito: el hecho había sido ampliamente publicitado también en algunas redes sociales, dada la particularidad de la velada. El control fue activado inmediatamente por el Carabineros forestales di Carpegna y la Unidad de Investigación de la Policía Ambiental, Agroalimentaria y Forestal del Grupo Carabinieri Forestale de Pesaro y Urbino que intervinieron en el hecho delictivo antes de la preparación de la cena.
El dueño del restaurante tendrá que responder por Delito de comercialización y tenencia ilícita de aves; de hecho fue denunciado en estado de libertad a la autoridad judicial competente por haber violado las prohibiciones previstas en el artículo 21 párrafo 1 letra "bb" de la ley 157/92 con las penas que, en caso de condena, prevén de conformidad con artículo 30 párrafo 1 letra “l” de la misma ley, arresto de dos a seis meses o la multa de 516,00 € a 2.065,00 €.
El artículo 21 establece expresamente que está prohibido vender, mantener para vender, comprar aves vivas o muertas, así como sus partes o derivados fácilmente reconocibles, pertenecientes a la fauna silvestre, que no pertenezcan a las siguientes especies: Pato real; perdiz roja; perdiz de Cerdeña; perdiz; Faisán; Paloma de los bosques.
Durante las operaciones, 49 zorzales (Turdus spp.), 6 becadas (Scolopax rusticola L.) y despojos relacionados fueron incautados criminalmente. El restaurador ha sido denunciado ante las autoridades judiciales por haber violado las prohibiciones previstas por el artículo 21 de la ley 157/92. El hombre también será acusado de infracciones administrativas relacionadas con la falta de trazabilidad de los alimentos con sanciones previstas hasta 4.500 euros (Centro pagina.it).