La policía de caza de silvicultura intervenido en las últimas horas dentro del Parque regional Gutturu Mannu, no lejos de Cagliari, para combatir el fenómeno de la caza furtiva. Según lo informado por La Nuova Sardegna, el bombardeo fue realmente masivo y tuvo como saldo final la denuncia despreocupada de seis personas. Las acusaciones en disputa son diferentes, a saber caza con medios no autorizados, detención de especies animales protegidas y observación de aves. Además, se ha incautado mucho juego prohibido, capturado gracias a herramientas muy especiales, sin olvidar la recuperación de las áreas involucradas.
Las quejas fueron posibles después de una serie de acoso: los cazadores furtivos fueron capturados in fraganti al igual que arreglaron redes, trampas y otras herramientas y estaban recuperando a los animales. En particular, los agentes detuvieron a un joven de Capoterra de 32 años, ya conocido por sus delitos relacionados con la caza furtiva, un de Capoterra de 46 años, un de Pula de 45 años, un Cagliari de 31 años, un de Capoterra de 31 años y un joven de 27 años de Capoterra. En cuanto a los secuestros, sin embargo, hay que subrayar las piezas de un ciervo de Cerdeña, nueve jabalíes, 75 tordos, tres tortugas protegidas, más de 4 mil lazos, 170 redes y alrededor de 900 lazos utilizados para la captura de ciervos y jabalíes.
Entre otras cosas, este juego prohibido fue revendido a algunos restaurantes de Cagliari, como se desprende de una serie de expedientes encontrados durante el operativo: las denuncias penales fueron acompañadas de denuncia a la autoridad de seguridad pública y A los cazadores furtivos se les prohibió visitar el área de Gutturu Mannu. Además de la Silvicultura, los voluntarios de la Lipu (Liga Italiana de Protección de Aves) y el de otras asociaciones como LAC, LAV y WWF. La colaboración ha durado algún tiempo e incluye una serie de iniciativas de concienciación en las escuelas de Cerdeña para proteger la biodiversidad y el medio ambiente.