Contención y vigilancia
en Cerdeña Sur Vuelve la alarma por los daños causados a los cultivos y las estructuras agrícolas por la fauna silvestre. En un territorio que ya sufre oleadas de sequía y crisis hídrica, sin una intervención para frenar los daños causados por jabalíes, coipos y cuervos, la situación de la agricultura se vuelve aún más preocupante, afirma Coldiretti Cagliari, que renueva su solicitud para implementar medidas oportunas, comenzando por los planes provinciales de contención y monitoreo, compartidos con agricultores, ganaderos, prefecturas, municipios y la región.
No más esperas
El año pasado, ganaderos y agricultores de toda la isla salieron a la calle, movilizados por Coldiretti en sentadas y mesas redondas organizadas con prefectos e instituciones. «No podemos esperar más —explica Giorgio Demurtas, presidente de Coldiretti Cagliari, en una nota—. Los cultivos son devastados a diario y los planes de contención suelen ser insuficientes o demasiado burocráticos: es fundamental simplificar los trámites y activar equipos operativos territoriales, involucrando directamente a productores y administraciones locales. Es urgente crear un pacto territorial preventivo, menos costoso y mucho más eficaz que las indemnizaciones tardías, capaz de devolver la tranquilidad a los campos y la seguridad en las calles».
Graves daños para todos
Giuseppe Casu, director de Coldiretti Cagliari, también envía un mensaje claro: «Recibimos numerosos informes de los territorios sobre los daños causados por la fauna silvestre. Se trata de especies que ya han superado los límites de seguridad, causando graves perjuicios no solo a las empresas agrícolas, sino también a la sociedad civil. Es necesario restablecer un equilibrio que, en muchos casos, se ha roto», concluye.