Una ciudad que cobra vida
La fiesta del santo patrón de Macerata, San Giuliano, es un evento de gran importancia para la comunidad local, que combina tradición, fe y participación colectiva. Entre los protagonistas indiscutibles de esta celebración se encuentran los cazadores de Macerata, que desempeñan un papel fundamental durante la procesión del Santo. Cada año, el 31 de agosto, la ciudad cobra vida para honrar a San Giuliano, el santo patrón conocido por su hospitalidad y protección. La procesión, que recorre las calles de la ciudad, es tradicional, un momento de gran devoción y participación popular.
El papel de los cazadores
Es precisamente durante esta procesión cuando los cazadores de Macerata adquieren un papel central, ya que son quienes portan la estatua del Santo. Este gesto simbólico no sólo representa un acto de fe, sino también un homenaje a la tradición e historia de la ciudad, así como una forma de integración entre el mundo cinegético y la sociedad.
Tradiciones para mantenerse vivas
La presencia de cazadores en la procesión es señal de continuidad y vínculo con el pasado; encarnan los valores de comunidad y solidaridad, subraya el presidente de la Federcaccia de Macerata, Virginio Micozzi, recordando a todos la importancia de mantener vivas las tradiciones que definen sus identidades. También son muy sentidos los agradecimientos del vicepresidente provincial de la Federcaccia Macerata, Michele Merola, por el compromiso y la dedicación que demuestran los cazadores en este tipo de actividad (fuente: FIDC).