La Fábrica de armas Pietro Beretta anunció los datos oficiales relativos al balance energético del año pasado. 2015 terminó hace apenas un mes y, además de adquisiciones recientes en los EE. UU., la empresa Gardone Val Trompia quiso destacar la atención prestada a consumo, teniendo en cuenta que también fue el año en el que las diplomacias internacionales acordaron los cambios climáticos en París después de la Conferencia de las Partes. En detalle, los doce meses se concluyeron con un consumo energético que El 72% se deriva de la autoproducción. El 28% restante, en cambio, se refiere a compras de energía en el mercado, con una venta a la Gerente de Servicios Energéticos (GSE) del 29% de lo que era de producción propia.
Además, la reducción de las emisiones de dióxido de carbono fue de 55 puntos porcentuales, lo que quiere decir que no se liberaron 7360 toneladas a la atmósfera (6700 de energía hidroeléctrica como fuente renovable y 660 de cogeneración. Franco Gussalli Beretta, número uno de la empresa lombarda, comentó estos números de una manera más que positiva. De acuerdo con él, los resultados deben leerse con satisfacción, pero el grupo aún no está satisfecho, por el contrario se estimula a representar una realidad industrial activa en la economía verde y atenta al medio ambiente.
Además, según el presidente, la mejora en esta área solo se puede lograr a través de inversiones específicas y mejorar el rendimiento energético, tanto en los procesos industriales como en la autoproducción. Gussalli Beretta comentó cómo la historia industrial de Beretta puede presumir de más de cinco siglos y cómo la práctica del ahorro de energía no es un descubrimiento reciente.
La atención al medio ambiente es un compromiso que ha durado más de cien años, dado que, como recordó el mandatario, Beretta adquirió los derechos de uso de un desagüe hidráulico en el río Mella en 1913 (entre las provincias de Brescia y Cremona), más precisamente a lo largo del valle y a través de la planta de Gardone Val Trompia. De esta manera se alimentó una planta de energía de 440 kilovatios, la llamada “Bresciana”, el primer paso hacia el ahorro energético actual.
Otro paso importante en este sentido fue el de 1939, año en el que entró en funcionamiento una planta similar (1200 kilovatios para ser precisos), denominada "Rovedolo", que se benefició de la incorporación de una planta de cogeneración en 1998, sin olvidar la reactivación de la planta "Blue Energy" en 2002. Durante 2013 se realizaron más inversiones en fotovoltaica y en la actualidad en Gardone Val di Trompia la energía es generada por dos plantas.