Le sucedió al comandante de la Policía Local del Municipio de Prevalle, en la provincia de Brescia, quien luego de una larga excursión judicial compuesta por denuncias, reconvenciones, recursos, etc. Duró unos seis años, fue condenado por el Juez de Paz de Salò por haber interferido en los controles de caza de cuatro guardias de caza voluntarios de la WWF y los Lipu. Los hechos se remontan a diciembre de 2006 cuando el policía de tránsito se encontraba cazando en compañía de unos amigos; durante la jornada de caza el grupo de cazadores fue abordado por cuatro Guardias Voluntarios de Caza de la WWF y los Lipu que querían realizar un control de caza.
En particular, según los controladores, uno de los cazadores acababa de matar un ave perteneciente a una especie protegida pero el policía de tránsito intervino en este punto presentándose como policía judicial y oponiéndose así al control de caza; según el policía, los operadores de las dos asociaciones no tenían derecho a realizar la verificación, por lo que invitó a los compañeros de caza a no ser identificados.
Según los documentos presentados en el tribunal, la injerencia del policía de tránsito se había llenado de amenazas de demanda y de una actitud intimidatoria general hacia los guardias para solicitar la intervención de los carabineros en el lugar que aparentemente habían resuelto los desacuerdos e identificado. todo el presente. Poco después, sin embargo, parece que el policía de tránsito volvió a amenazar a los voluntarios y los insultó duramente para que presentaran una denuncia formal y posteriormente se denunció al policía de tránsito en libertad.
Después de casi seis años, el Juez de Paz de Salò, competente para el territorio en cuestión, decidió aceptar las razones de los guardias voluntarios y condenó al policía de tránsito al pago de una multa de 600 euros, de 1.500 euros como indemnización por daños y perjuicios. cada uno de los cuatro operadores que habían formado parte civil en el proceso y para el pago de las costas judiciales. De hecho, los jueces decidieron no aceptar la justificación presentada por el policía de tránsito según la cual los guardias voluntarios no eran reconocibles como tales, ni identificables, durante la intervención.
Marzo 19 2013