Esta ave de rapiña es capaz de volar hasta 320 km / h. Sus ataques a los patos son fatales. Esta técnica de caza ve la colaboración entre el cetrero y el Halcón: el primero hace volar a los patos, el segundo los captura.
El halcón peregrino es una especie de halcónido que se encuentra en casi todo el mundo. Es conocido por la gran velocidad que puede alcanzar en la caza, que ronda los 320 km / h, lo que lo convierte en el más rápido del reino animal. La del halcón peregrino es considerada una de las técnicas de caza más fascinantes y clásicas de la cetrería. Las presas que se pueden cazar con esta ave son el ánade real, el garganey, el cucharón y las cercetas.
Los expertos consideran muy compleja esta técnica de caza con Halcón, ya que los patos son aves muy rápidas y son capaces de repeler y esquivar los ataques. Si bien el uso del perro no es imprescindible, muchas veces se ve obligado a realizar largos viajes para llegar a las zonas frecuentadas por los patos, con los consiguientes elevados costes de combustible.
La técnica de caza con el halcón peregrino se practica en ambientes húmedos, cerca de canales, aguas claras y recogidas que atraen a los patos. Estos últimos, como el ánade real que es la principal presa, residen en Italia pero son alcanzados por el doble paso de los migrantes. Durante el período de caza están presentes en gran número y esto puede dar un cierto margen de seguridad al cazar con Falco. El mejor momento para liberar a nuestro Falco es al amanecer y al atardecer, mientras que si usas el vuelo bajo (Astòre) puedes cazar durante todo el día.
El adiestramiento del halcón peregrino, como ocurre con todas las aves rapaces utilizadas en la caza, es fundamental. Con este fin, se utilizan ánades reales de entrenamiento / entrenamiento, para enseñar al joven Falco los rudimentos del ataque. Cuando se decide utilizar el halcón peregrino en la caza real, es necesario introducir los halcones cerca de la apertura de la temporada de caza, con el fin de aprovechar la abundancia de ejemplares de patos jóvenes aún inexpertos y en consecuencia presa fácil.
Se necesitará aproximadamente una temporada de caza completa con vuelos de 2 a 3 veces por semana o más, para enseñarle al Halcón las técnicas para atacar a los patos. Se debe prestar la máxima atención al desarrollo de la musculatura de los halcones, para permitirles permanecer en vuelo hasta 20 minutos antes de que puedan iniciar un ataque. El peso ideal de un halcón peregrino debe ser de al menos 850 gramos.
El área de caza no debe consistir en una masa de agua demasiado grande, de lo contrario los patos no volarán y no debe haber áreas antropizadas y / o vallas en el área de caza. El halcón se alejará volando de la zona de caza para no alarmar demasiado pronto a los patos. El cetrero con el gavilán en espera de vuelo, debe avanzar hacia el cuerpo de agua y el gavilán debe permanecer exactamente centrado, a una altura no superior a los 100 metros. El cetrero tendrá la tarea de hacer volar a los patos, que serán atacados por el gavilán en picada a una velocidad de unos 320 km / h.
Es importante recordar que el halcón, a alturas superiores a los 100 metros, puede alcanzar y quizás superar la llamada velocidad crítica de la que su cuerpo, con las alas cerradas, es capaz de descender en picado. Brevemente, recordemos que la velocidad crítica es la que puede alcanzar un cuerpo, de cierto peso y forma, acelerado por la fuerza de la gravedad y ralentizado por la resistencia del aire. Hangte, en 1968, supo calcular que la velocidad crítica del halcón peregrino podría situarse entre 368 y 384 kilómetros por hora. Otra característica del halcón peregrino es la rigidez de las plumas de vuelo, fundamental para la maniobrabilidad al final de la inmersión. Pero las plumas rígidas también significan plumas frágiles, por lo que la captura debe realizarse siempre en espacios abiertos, evitando el riesgo de golpes con ramas e incluso follaje. La estrategia de caza del halcón peregrino consiste en el intento de situarse en una posición dominante hacia la presa probable. La captura real se produce con el llamado "jab", un golpe con ambas garras, que debe aturdir, desequilibrar o herir a la presa, que caerá al suelo, donde es asesinada con el poderoso pico.
La técnica de caza con el halcón peregrino es fascinante y sugerente. Ver y admirar a este animal descendiendo a gran velocidad es un espectáculo de la naturaleza.