La Quinta Sección de la Tribunal Administrativo Regional de Campania aceptó el llamamiento de un cazador denunciado por el guardias de caza de la LIPU con denuncias de robo y otros delitos. Las disputas habían iniciado el juicio contra el hombre, absuelto al cabo de un tiempo con plena fórmula por no haber cometido la escritura. Pero, ¿qué pasó exactamente? A pesar de la absolución esta persona no había podido recuperar su licencia de caza, ya que los Carabinieri habían negado la renovación, así como la Jefatura de Policía de Ischia.
El recurso al TAR no fue fácil, también porque la policía tiene una gran discreción desde este punto de vista. Sin embargo, los jueces evaluaron el caso de manera objetiva. El cazador corría peligro de sufrir daños muy graves e irreparables, por lo que su posición debía protegerse a toda costa.
Se canceló la suspensión de la licencia y el recurso de casación se resolverá sobre el fondo a finales de año, concretamente el próximo 6 de diciembre (por lo tanto, en ocho meses). Sin embargo, a la espera de la nueva audiencia, el hombre podrá renovar su licencia de armas de fuego: su puesto ha sido cuidadosamente revisado y esta sentencia podría convertirse en un precedente determinante inspirarse en situaciones idénticas.