La satisfacción fue palpable, un reconocimiento al esfuerzo realizado en esta área, como lo deseaban con visión de futuro los propietarios. Como explicó el propio Mariella, se han realizado inversiones específicas, pero el objetivo nunca se hubiera logrado sin la valiosa colaboración de todos esos colegas que han hecho de la cultura de la seguridad una verdadera excelencia corporativa.
Stefano Fiocchi, número uno de la ANPAM, expresó su satisfacción por lo que es una importante confirmación. Según Fiocchi, de hecho, las empresas que forman parte de la asociación comercial se caracterizan por tales esfuerzos, con la producción de armas y municiones que deben ser sinónimo de seguridad laboral, así como elementos como investigación y desarrollo, confiabilidad y diseño.