Volvemos a celebrar hoy en todo el mundo Día Mundial de la Tierra, edición número 52 de quizás el mayor evento internacional para concienciar sobre la sostenibilidad ambiental y protección y salvaguardia del planeta. El tema de este año es una invitación a invertir en nuestro futuro. Un futuro que aparece cada vez más amenazado por muchas causas objetivas ahora conocidas: cambio climático, negligencia, abandono, contaminación, inestabilidad hidrogeológica, sobreconstrucción, antropización, consumo de suelos fértiles, a menudo expansión incontrolada de especies exóticas y la consiguiente pérdida de biodiversidad...
Situaciones bien conocidas por los técnicos y científicos, discutidas, analizadas, pero a menudo no se aborda de manera concreta por las más diversas razones, sirviendo en el mejor de los casos para otro titular alarmista en los medios de comunicación, que llamará la atención de la mayoría de los ciudadanos que, con un “Me Gusta”, aclararán su conciencia sintiéndose ecologistas. Nosotros cazadores, pescadores, habitantes de la áreas rurales, protagonistas de oficios ancestrales o más simplemente personas concienciadas y no adoctrinadas por ideologías de salón, somos diferentes. Nuestro amor y atención por la Tierra, cuyos frutos disfrutamos y tomamos con gratitud y respeto, de manera sostenible y reglada, lo expresamos todos los días, viviendo el territorio y protegiéndolo, manteniendo vivos los ritos y valores de la ruralidad. que alrededor del conexión con la naturaleza nacieron y se transmitieron y guiaron la vida y evolución de la sociedad hasta que este pacto se disolvió en una parte de ella.
Como cazadores creamos y preservamos miles de hectáreas de áreas naturales. El interés cinegético orienta los recursos hacia la conservación de la naturaleza y constituye una barrera a la pérdida de hábitats y especies. Invertimos ingentes recursos en el estudio y conservación de las especies y el equilibrio entre ellas. Y así lo haremos también hoy, en este día simbólico. Importante sí, pero para muchos, demasiados, limitados a un solo día y tal vez a un algún evento digital. Pero la naturaleza, para conocerla, amarla y protegerla, hay que vivirla y cuidarla todo el año. Como los cazadores siempre hemos estado acostumbrados a hacer, invirtiendo en nuestro futuro y el del resto de la sociedad. Feliz Día de la Tierra (fuente: Federación de Caza).