Sin embargo, tal papel no está protegido por ningún tipo de ley. Por ello, la iniciativa europea nació con el objetivo de recoger al menos un millón de firmas y reivindicar el derecho. El objetivo es hacer del suelo un patrimonio común que merece protección a nivel comunitario por los beneficios que puede aportar.
La recogida de firmas empezó hace dos días, Jueves 22 de septiembre de 2016, en el Salone del Gusto en Turín y durará un año ya que finalizará en septiembre de 2017. El mundo cinegético quiere hacer su aportación con estas ilustres membresías, en particular poniendo a disposición sus estructuras territoriales: la intención es demostrar cuán concreto es el compromiso de los cazadores cuando se trata de proteger los intereses nacionales e internacionales.