lorenzo croce, número uno deAIDAA (Asociación Italiana de Defensa de los Animales y el Medio Ambiente), volvió a hablar de un tema del que había hablado mucho hace varios meses. Estamos hablando de la sacerdotes cazadores, más precisamente de los datos que les conciernen en relación con temporada de caza 2014-2015. Estamos hablando de hace tres años y en base a estos números los sacerdotes que van a cazar eran unos 200.
Unas semanas antes del inicio de la temporada 2017-2018, sin embargo, estarían a menos de 40, por tanto, una quinta menos: son los que han renovado su licencia y Croce subrayó el descenso respecto a hace 36 años, el 70% en particular. Según la asociación de derechos de los animales, las razones son dos. El primero está representado por la edad avanzada de los sacerdotes, mientras que el segundo se refiere a laintervención de algunos obispos quien hubiera disuadido a estos cazadores, culpables de "disparar a otras criaturas de Dios".
Croce citó luego la historia de Don Luciano Bardesone, un párroco al que le robaron dos pistolas durante un robo en la rectoría de la provincia de Turín. En noviembre, el presidente de AIDAA escribió una carta nada menos que a un Francisco concienciarlo de este fenómeno e invitarlo a excomulgar a los sacerdotes que practican la caza, considerada en contraste con la principios dictados por el cristianismo.