Revisa la regla que llama a los cazadores a responder por los dioses. daño a la agricultura causado por verracos. La "cuestión del jabalí" es fundamental para la sección municipal de Federcaccia Perugia, que un año después de la inauguración del nuevo Patronato hace balance de la actividad desarrollada. En los últimos doce meses han sido muchas las iniciativas del tramo municipal, tanto lúdicas como técnicas. A partir de los distintos eventos sociales, como la gran fiesta de Ponte San Giovanni o el brindis de Sant'Uberto, hasta tocar aspectos concretos del ars venandi, como el curso de calificación para el seguimiento de becadas -con el profesor Pennacchini- o la contribución a la investigación sobre migración de la paloma torcaz.
La nueva sección municipal se ha comprometido de inmediato con la defensa y protección de todos sus integrantes en cualquier institución, institucional y judicial, con acciones muy importantes que nos han visto victoriosos. Desde el aspecto de la gestión del sedentario, la sección ha impulsado y creado Áreas Temporales de Respeto para la preservación y el aumento de la caza noble. Esta acción va acompañada de una repoblación masiva de liebres y faisanes, estos últimos del nuevo tipo, que está dando excelentes resultados. La reposición, entonces, se completará con los lanzamientos de verano. En cuanto a la formación, el programa de formación preparado es muy rico: planeamos implementarlo lo antes posible las reglas sobre el distanciamiento social ellos lo permitirán.
Y nuevamente: la acción masiva para combatir las especies oportunistas ha producido, solo en enero, la matanza de más de 150 jabalíes en las áreas de repoblación y captura del Perugino, con un beneficio proporcional para todas las demás especies silvestres, Cazable y no. Desde el punto de vista canino, entonces, la sección había elaborado un plan de competencia sobre jabalí, liebre y caza de plumas, lamentablemente bloqueado por el Coronavirus. Para Federcaccia Perugia el "Pregunta de jabalí" merece un capítulo aparte: “Nuestro tramo municipal, dada la normativa autonómica sobre daños a los cultivos, plantea el problema de la protección económica de sus afiliados jabalíes, también teniendo en cuenta la difícil situación económica que siguió a la pandemia.
Creemos que es impensable que los cazadores, muchos de los cuales están jubilados, mientras que, entre los jóvenes, no hay escasez de desempleados, deban ser cuestionados por compensación por daños causados por la vida silvestre, como exige la normativa autonómica vigente. El chofer de jabalí, además de sufragar los gastos normales de la licencia y el funcionamiento de su equipo, presta un servicio a la comunidad en cuanto a prevención de daños a cultivos, reducción de accidentes viales, defensa de los ecosistemas locales y biodiversidad, dado que el jabalí se adapta a cualquier territorio arrollando a otras especies hasta el punto de provocar su progresiva desaparición ”.