Con gran pesar nos enteramos de la desaparición de Valentina Cortés, con razón llamada "la última gran diva" de nuestro país. Durante años encerrada en la vida privada, tal vez sea desconocida para las últimas generaciones, pero difícilmente amantes del cine y del teatro se habían olvidado de ella. La Cortese ha trabajado con los mejores directores, desde Giorgio Strehler hasta Truffaut, de Michelangelo Antonioni a Federico Fellini y Franco Zeffirelli, de Bergman a Filippo Crivelli, dando vida a interpretaciones que han entrado con razón en la historia del espectáculo.
De origen humilde, se había criado en el campo "Entre gente simple y real" como le encantaba recordar y como en estas horas informan hablando de ella, periódicos y televisores. Lo que no recuerdan, pero nosotros sí, es que Valentina Cortese también era una de nosotras, una cazadora, también miembro del CIC, el Consejo Internacional de Caza y Salvaguardia de la Fauna. Nuestro cordial y respetuoso saludo para la mujer, la actriz y la cazadora.