Es triste tener que responder a lo comunicado por el Ciudad Metropolitana de Bolonia, que para no asumir responsabilidades obvias, intenta descargarlas en los responsables de ATC de la caza planificada, que siempre han estado activamente involucrados en contención numérica de la especie de jabalí, pero de hecho no puede hacerlo desde principios de marzo, siguiendo el DPCM del Gobierno y las ordenanzas del Región de ER, por las medidas para contener el contagio del COVID 19. Atc, por tanto, bloqueó el desarrollo de múltiples actividades dentro de su competencia, salvo la gestión del Control que en cambio se ha mantenido activo y en manos de la Ciudad Metropolitana.
La contención numérica del jabalí ha sido un problema complejo durante años: la falta de solución siempre se atribuye erróneamente a los cazadores. La aclaración que se debe hacer, a la Concejala Metropolitana con Delegación en la Policía Local de la Ciudad Metropolitana, es que los cazadores operan en los planes de control de forma voluntaria y por cuenta propia, cumpliendo con las normas establecidas por las autoridades, muchas veces engorrosas y limitando la eficacia de las propias intervenciones. La falta de coordinación entre las intervenciones, en las áreas del parque, de oasis o protegido de otra manera, no por el mundo de la caza y el Atc, conduce a la situación típica de algunas zonas de la zona boloñesa, ricas en reservorios inviolables de los que salen los animales a alimentarse provocando daños y accidentes de tráfico, para luego regresar sin ser molestados.
Varias veces el mundo cinegético y los ATC han vuelto a proponer acuerdos que prevén sinergias operativas en el manejo y control del jabalí, en todo el territorio, áreas de caza y áreas protegidas, pero estos convenios nunca han sido ratificados y por lo tanto aplicados. Y sobre esto invitamos a la Ciudad Metropolitana a actuar, ya que, como lo exige la Ley 157/92, aparece como el primer responsable de la gestión de los planes de control de vida silvestre. Sería correcto, al lanzar la piedra, no retirar la mano. Si vienes a mencionar el falta de transparencia, deben mencionarse los episodios individuales; si temen cometer un delito, deben ser procesados.
No se puede demonizar una categoría por rumores o sospechas. También hay que recordar que es la Región, órgano encargado de controlar el trabajo de la Atc, a través de la STACP, la Oficina de Caza y el Departamento de Agricultura: en esto no interviene la Ciudad Metropolitana, salvo los controles policiales. cazadores individuales. En este momento de fuerte crisis económica y social, sería conveniente que los Representantes de los Organismos Públicos mantuvieran un tono más receptivo a los objetivos a alcanzar, buscando la máxima colaboración operativa, con el mundo cinegético y con el Atc de esta provincia.
Todos los interesados deben asumir sus responsabilidades, no alimentando contrastes estériles, pero manteniéndose enfocados en el objetivo de reducción numérica de la especie de jabalí, para hacerlo sustentable desde el punto de vista ambiental y social. Los Cazadores son absolutamente conscientes de la necesidad de buscar la sostenibilidad ambiental y social. de la especie de jabalí, mediante un muestreo de caza y control focalizado y finalizado, dará la máxima disponibilidad a las intervenciones necesarias, que deberán ser coordinadas y ejecutadas de forma adecuada y sinérgica. (El presidente de la Sección Provincial Federcaccia de Bolonia, Daniele Colli)