Coldiretti Lacio da la bienvenida a la Región por la publicación de la convocatoria el desembolso de contribuciones a empresas ganaderas con granjas de ovejas para contención de los ataques de los lobos. "Una primera señal de apoyo a los criadores de ovejas gravemente afectados por los ataques de los lobos a sus rebaños - explica el presidente de Coldiretti Lazio, David Granieri - Un problema que afecta a una cadena de suministro muy importante en nuestro territorio, que cuenta con alrededor de 39 granjas de ovejas, a menudo complementadas con granjas de cabras, presentes en 856 granjas. Números que nos llevan a ser el primero en italia.
Coldiretti Lazio siempre ha captado las dificultades ligadas a la cadena de ganadería ovina, que abastece a importantes cadenas de elaboración de quesos típicos y ha representado las peticiones a las instituciones, urgiendo intervenciones urgentes, como la que acaba de aprobarse. “Solicitamos de inmediato esta medida, que además, se inscribe en la perspectiva de la simplificación y desburocratización - concluye Granieri - en el que siempre hemos luchado desde el inicio de la pandemia, para garantizar liquidez inmediata a las empresas, para permitirles tener una inyección de oxígeno, ante la crisis económica provocada por la emergencia sanitaria ”.
En particular, el desembolso de la contribución cubrirá los costes de las primas de seguros pagadas por las explotaciones ganaderas con explotaciones ovinos para la retirada y eliminación de los cadáveres de ovinos y para la sustitución de los ovinos muertos por el lobo y por la compra de LGD. En el primer caso, es elegible lo siguiente: hasta el 100% de la prima pagada por pólizas de seguro para cubrir la retirada y destrucción de los cadáveres de ovinos muertos por el lobo; hasta el 75% de la prima pagada por pólizas de seguro para cubrir el reemplazo de oveja asesinada por el lobo.
En el segundo caso, por otro lado, el 70% del costo incurrido para la compra de la (s) LGD (s) es elegible, incluidos los costos relacionados con el microchip, el registro del perro (o alternativamente con la transferencia de propiedad y de el nombre del tutor beneficiario), a la atención veterinaria ordinaria y la formación necesaria en la empresa. No obstante, existe una aportación máxima por cada perro de 800 euros. La presentación de solicitudes de subvención debe realizarse antes del 28 de agosto de 2020.