Según lo informado porANUUMigradores en la actualización semanal habitual sobre el pase de migración, los amigos alados no dieron una respuesta positiva después de eso leve recuperación que pensamos que apoyaría las esperanzas de los ornitólogos de ver los Prispoloni, las enfermeras negras y todos esos veranos que hasta la fecha nos han desilusionado. Solo la presencia constante y continua de Becafigo, monitoreado en el Observatorio Ornitológico FEIN de Arosio, muestra una tendencia positiva de la especie.
Se observaron con interés los primeros Blackcaps y el simpático Robin que debía presagiar, según los recuerdos de los ancianos cazadores, las señales de la llegada del tan deseado Song Thrush. Las condiciones meteorológicas han vuelto a influir migración desde el norte del Paleártico occidental, desde donde se espera el primer descenso del frío. Veremos qué pasará en este contexto climático verdaderamente "loco".