La sección de Bérgamo del Federación Italiana de Caza anunció una petición lanzada por el alcalde del municipio orobico de Sedrina, Esteban Micheli, para salvaguardar el rocoli. Como se explica en el texto, el término municipal se caracteriza por la presencia de cuatro antiguos rocoli, utilizados para la captura de aves silvestres y que datan de alrededor del siglo XIV. Cada uno tiene un nombre y está dirigido por una familia diferente: se trata de Fontanù, Pràt, Pracc Parì e Benac. Representan un sistema cultural de reorganización ambiental, así como una defensa histórica y la memoria de las tradiciones.
En pocas palabras, la comunidad puede encontrar un punto fuerte en el roccoli, en que mejoran la calidad del paisaje montañoso y tienen un impacto más que positivo en la economía local. Desde el pasado verano (julio de 2015 para ser precisos), el Senado aprobó un artículo ya aprobado por la Cámara sobre la prohibición de la captura y uso de redes para el suministro de señuelos vivos. De esta manera se impuso el final de las bobinas y en poco tiempo hasta podrían desaparecer.
El municipio de Bérgamo está muy preocupado por las consecuencias negativas que se materializarían debido al cierre, en particular el abandono y descuido de muchas porciones del territorio, todo con elevados costes económicos y medioambientales. La petición sirve precisamente para lanzar un llamamiento a las instituciones, para que aborden el problema lo antes posible. Otra solicitud es transmitir la resolución a los órganos superiores de gobierno, sin olvidar que la misma resolución fue aprobada legalmente y puede ejecutarse de inmediato.