Controversia sin fin
La polémica entre los cazadores sobre el pre-apertura. La política que se alegra y luce medallas por haber conquistado este día de caza de la paloma de la tortuga, pero ya sabes, estamos en campaña electoral y el modelo político de "Cetto La Qualunque", un conocido personaje interpretado por Antonio Albanese, es el maestro. Esto, mientras al otro lado de la valla, uno permanece absorto en sus propios pensamientos, como cantaba Vasco Rossi, hablando sobre el tema en los comerciales. En esta historia han aflorado todos los límites de la política, es hora de que el mundo cinegético se haga algunas preguntas. Lo que ha pasado en los últimos dos años en Umbría es el fracaso de las políticas cinegéticas, que debían apoyar a los cazadores, intentando hacerles comprender la compleja dinámica que gira en torno a la caza, los intereses conservacionistas internacionales, las estrategias europeas para la conservación de la Biodiversidad. Temas que han caracterizado los últimos treinta años de políticas europeas y que, de manera abrumadora, influyen en las elecciones que estamos llamados a hacer en la elaboración de los calendarios de caza y en la gestión del territorio; decisiones que tienen un fuerte impacto emocional en los cazadores.
Los niveles de la población
Se hace muy necesario, en este punto, aclarar algunos aspectos fundamentales: la tórtola, según la clasificación de Bird Life International, es considerada SPEC 1, clasificada como gravemente amenazada, e incluida en la Lista Roja de la UICN con la clasificación de vulnerable. Según la Directiva Europea 2009/147/CE, relativa a la conservación de las aves silvestres según su nivel de población, distribución geográfica y tasa de reproducción en la Comunidad, las especies enumeradas en el Anexo II (entre las que se inserta la tórtola silvestre Streptopelia turtur) pueden cazarse de conformidad con la legislación nacional, entendiéndose que en el caso de una especie en declive, la caza no puede, por definición, ser sostenible, a menos que forme parte de un plan de gestión adecuado, que incluya la conservación del hábitat y otras medidas capaces de frenar y revertir la rechazar. En marzo de 2022, por tanto, se aprobó el plan nacional de gestión de la tórtola silvestre, en desarrollo del plan de acción europeo que prevé una gestión adaptativa de la retirada a nivel continental, siempre que se apliquen medidas de mejora ambiental a escala significativa, que controlen adecuadamente se realicen en relación con el cumplimiento de la normativa sobre actividades cinegéticas, que se efectúe una retirada máxima del 50% respecto a las matanzas de años anteriores y que se adopte un sistema de notificación inmediata de las matanzas para que la retirada no supere lo establecido cuota.
Lo que surge de las cartas de caza
A la luz de lo anterior, la Región de Umbría, en la consulta faunística, comunicó a las cofradías cinegéticas las prerrogativas para el ejercicio de la recogida de la tórtola, a saber: la realización de las mejoras ambientales previstas en el plan de actuación, la necesidad de establecer la cuota que se puede retirar, una cifra que solo se puede inferir de la lectura de las tarjetas de los años anteriores, y un sistema que permitiría la notificación inmediata de las rebajas mediante una tarjeta electrónica u otro sistema, pero que siempre se puede utilizar a través de un teléfono inteligente, ya que, por el momento, no hay disponibles otras herramientas capaces de cumplir con estos requisitos. Algunas asociaciones de cazadores se opusieron inmediatamente a esta solución. En junio fuimos informados por la Región de Umbría del número de animales que se pueden capturar y, en la reunión del 4 de agosto, la Región, consultando a las asociaciones de caza, preguntó si debía o no introducir la especie en pre-apertura adoptando las medidas previstas en el plan de gestión de la especie. A esa fecha aún no se había implementado ningún sistema para reportar la matanza, solo en la reunión del 23 de agosto nos ilustraron los métodos para reportar y en ese momento había poco que hacer: aceptar lo que se proponía, o no cazar la tórtola en pre-apertura.
Conceptos clave
El Consejero, astutamente, pidió que la decisión se tomara por unanimidad, ante esto, cualquier Asociación se hubiera permitido discrepar, habría sido puesta en la picota por las demás, y de hecho la culpa recaía enteramente en las Asociaciones. Estos son los hechos, la elección fue: no preabrir o hacerlo en base a la correcta aplicación del plan de manejo. Para Arci Caccia el único pesar es que todo esto se pudo haber evitado si las decisiones se hubieran tomado en el momento adecuado; en este caso habríamos tenido tiempo de informar a los cazadores de los métodos de recolección, corrigiendo los errores en el curso en caso de que fuera necesario. En marzo ya habíamos pedido al Concejal que aprobara el calendario de caza, tal y como marca la ley, antes del 15 de junio, también a la luz de que, en diciembre, se habían aprobado los nuevos Conceptos Clave, que prevén cambios sustanciales sobre la fechas de migración prenupcial e independencia de las crías, periodo en el que, según la Directiva de Aves, no se permite la caza, pero esa es otra historia, ¡esperemos que no acabe mal! Al seguir sin informar correctamente a los cazadores, solo hacemos el juego de nuestros detractores y de aquellos que quisieran acabar con la cacería. El 29 de septiembre todas las asociaciones cinegéticas serán convocadas para presentar sus propuestas con motivo de los Estados Generales de caza en Umbría convocados por el Concejal Morroni. Será entonces tarea de la Región elaborar una propuesta para los próximos años, esperando que la decisión final se tome, también en este caso, por unanimidad y no por mayoría (fuente: Caza de arco).