Animales positivos al virus
La situación de las granjas porcinas en EE.UU. es grave Zonas de restricción de PSA (Peste Porcina Africana): se para la producción, se bloquean los movimientos con el consiguiente riesgo de hacinamiento y, - añade Confagricoltura - para las empresas que todavía pueden comercializar, existe el insulto del desplome de los precios de venta de los animales. Hasta la fecha se han registrado 50 focos en Italia (Pavia y Lodi son las zonas más afectadas) y alrededor de 25.000 animales positivos. La situación ya no es sostenible. Por lo tanto, Confagricoltura insta a las instituciones a actuar con firmeza para encontrar inmediatamente una salida que permita la supervivencia de las empresas agrícolas y la protección de uno de los sectores estratégicos de la agroalimentación italiana con un valor total de más de 13 mil millones de euros y 2,3 mil millones en exportaciones.
Los daños sufridos por las empresas
Debemos intervenir pronto compensando a los ganaderos - afirma Confagricoltura - así como por los daños directos resultantes del sacrificio de animales, también para todas aquellas empresas que sufren daños indirectos debido al bloqueo de la circulación de los lechones nacidos en la explotación y que deben ir a otras instalaciones de engorde, o por la imposibilidad de vender los animales sobrantes que han llegado al final de su ciclo y deben enviarse al matadero. “Las empresas – explica el presidente de Confagricoltura, Massimiliano Giansanti – necesitan que se pongan en marcha todas las herramientas útiles para apoyarlas, también aliviando la presión de la deuda bancaria y los costes de la seguridad social”. El avance de la enfermedad a zonas muy adecuadas para la producción porcina exige un cambio de ritmo en la contención de la fauna silvestre: hasta ahora se ha hecho muy poco en este frente, hasta el punto de que la PPA sigue cruzando nuevas fronteras.
Carga viral alta
“Ya no es aceptable que se eliminen tan pocos jabalíes, causa real de la expansión de la enfermedad y su propagación a las granjas, ni se puede culpar a los ganaderos. Si no hubiera una carga viral tan elevada en el medio ambiente debido al número de jabalíes infectados, ciertamente no habría un riesgo tan alto de transmisión a las granjas que son víctimas y no causas de la infección – reitera Giansanti -. La intervención sobre la fauna y los incentivos a las inversiones en bioseguridad para todas las explotaciones, empezando por las adyacentes a las zonas restringidas, serán el camino a seguir para salir de esta grave epidemia". (Fuente CONFAGRICOLTURA)