Il Consejo de Estado fue muy claro en su última decisión. los guardias zoófilos ellos no tienen ninguno poder en materia de caza, por lo que no pueden supervisar la actividad de los cazadores, su única tarea consiste en proteger a las mascotas. Esta frase se refiere al recurso de casación que había propuesto la Liga para la Abolición de la Caza (LAC) contra una orden del Tribunal Administrativo Regional de Piamonte. Según los jueces, de hecho, estos sujetos no pueden ser considerados agentes de seguridad pública, por lo que la supervisión autónoma no forma parte de sus competencias.
Para los controles, incluso en el contexto de la caza, deberán hacer uso de la presencia de agentes reales y con competencias de policía judicial. Además de LAC, también la LAV (Liga Anti-Vivisección) se había opuesto a la orden del TAR. Hace algún tiempo, de hecho, el prefecto de Turín había establecido que su vigilancia era limitada, lo que indujo a las asociaciones de bienestar animal a apelar. El mismo Consejo de Estado rechazó el recurso, indemnizando íntegramente las costas judiciales debidas a la novedad parcial de estos temas.
Le pido amablemente al periodista si puede darme el número de la sentencia, para que la encuentre en la web del consejo de Estado, la imprima y la adjunte al sustancial archivo documental que llevamos al campo.
Peter
Cremona
Buenas noches,
la sentencia es el número 4653 del 9 de noviembre de 2016. El enlace para hacer clic para leerla en su totalidad es este: https://www.giustizia-amministrativa.it/cdsintra/cdsintra/AmministrazionePortale/DocumentViewer/index.html?ddocname=GLMIKVMKANYC6GWQV5TC5YHEB4&q=lac