Caza y maniobra anticrisis: “Robar a las hormigas para pagar la cuenta de las cigarras. Adelante con el Partido”.
Una clase política con un alto índice de irresponsabilidad e incapacidad, ciega y sorda, prepotente e insensible a las expectativas de la gente. La casta insiste en ignorar que cualquier persona con responsabilidades de liderazgo debe predicar primero con el ejemplo. Las medidas puestas en marcha imponen mayores sacrificios pero nadie apoya el crecimiento con el único objetivo de un presupuesto estatal equilibrado.
Además de meter las manos en los bolsillos de los italianos con nuevos impuestos, se aumenta la edad de jubilación de las mujeres y varias baratijas. Nadie debe sustraerse a sus funciones, cada uno en proporción a su respectiva capacidad de pago, como lo establece la Constitución.
Del examen inicial del decreto aprobado por unanimidad por el Consejo de Ministros, no se desprende rastro alguno de reducción del número de parlamentarios en la Cámara y el Senado. A la hora de reducir los costes de la política (23 millones de euros/año) se debería tratar no sólo de la reducción de Municipios, Provincias y Regiones sino sobre todo de Diputados y Senadores sean de derecha, de izquierda o de centro.
En cambio, la maniobra ha registrado más aumentos de ingresos que rudimentos de gasto. Incluso los ciudadanos cazadores están llamados a cumplir con su deber y no rehuyen hacer su parte de los sacrificios.
Sin embargo, exigen que se distribuyan equitativamente sin excepción. No existen reducciones en la financiación a las ENTIDADES DEL PARQUE y desembolsos por diversos motivos a las ASOCIACIONES MEDIOAMBIENTALES Y ANIMALISTAS.
CRCA se pregunta si esta clase política, clase o casta, si se prefiere, está en sintonía con el pensamiento común o será desechada y enviada a casa en las próximas elecciones. La gente común se aleja asqueada de la política, tanto que el partido mayoritario relativo en el país es de lejos el de la abstención.
Muchos preguntan: "¿pero a quién debemos votar? “Los hemos probado todos y los resultados son los que son. Apoyamos y esperamos que haya un cambio general y generacional pero sobre todo creemos que hay que cambiar hacia una nueva forma de hacer política.
Un papel importante en este cambio puede jugarlo un nuevo sujeto político que, protegiendo la civilización rural, la caza, el medio ambiente, poniendo en el centro al hombre, la solidaridad y la subsidiariedad, se enfrente al pensamiento metropolitano imperante.
En Francia, este partido es una realidad desde hace mucho tiempo, cuenta, haciendo sentir su peso político en el país y en Europa. Incluso en Italia solo podría ser con una condición: QUE TODOS SEAMOS UNIDOS Y COHESIVOS EN NUESTROS IDEALES Y VALORES.
OFICINA DE PRENSA CRCA - BÉRGAMO -
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