Caza en Toscana: La provincia de Livorno declara la guerra a los jabalíes y pide ayuda a cazadores y agricultores.
En un comunicado difundido hoy la provincia de Livorno destaca que “los problemas provocados por la presencia masiva de ungulados en el territorio provincial estuvieron en el centro de los encuentros promovidos por los concejales de caza, agricultura y turismo”. Para los dos concejales provinciales Ringo Anselmi (caza) y Paolo Pacini (agricultura y turismo) se reunieron con los representantes de las asociaciones del sector agrario y, posteriormente, con el área territorial de caza (Atc) 9 y los jefes de distrito de bateo de jabalí equipos.
El territorio del ATC 9 incluye los municipios de Livorno, Collesalvetti, Rosignano Marittimo, Cecina, Bibbona, Castagneto Carducci, San Vincenzo, Sassetta, Campiglia Marittima, Suvereto y Piombino y también de Capraia Isola donde, sin embargo, no hay jabalíes. El otro ATC provincial de Livorno es el 10, el que incluye los 8 municipios de la isla de Elba, donde el problema de los jabalíes importados por cazadores en la década de XNUMX es aún más grave.
Las cuestiones destacadas -dicen los dos concejales- se refieren, en particular, a los extensos daños a los cultivos provocados por los jabalíes, pero también a los peligros por el excesivo acercamiento de animales a los centros habitados y carreteras, especialmente en pleno verano. con la presencia de numerosos turistas. De las reuniones surgió, por tanto, la necesidad de proceder con una nueva campaña de matanza y captura para reducir al máximo la población de ungulados. En este sentido, todos los sujetos participantes, y convocados en diversas capacidades para intervenir en la problemática, coincidieron en la importancia de trabajar en estrecha colaboración para activar oportunamente tanto las intervenciones destinadas a limitar el número de animales, como las medidas previstas para desalentar el abordaje. . animales a cultivos y hogares ".
Los jefes distritales de los cazadores garantizaron la colaboración de los 22 equipos activos en la zona, con salidas, previstas con la participación de la policía provincial, que tendrán lugar en agosto y en los primeros diez días de septiembre.
La provincia sostiene que "el objetivo es matar y / o capturar una cantidad muy grande de animales, lo que reducirá significativamente la presión de la presencia de estos animales en el territorio".
La administración provincial también pretende involucrar a los ganaderos y "también activará los procedimientos previstos por el reglamento, que autorizan a los propios dueños de las fincas a intervenir directamente con la matanza de los animales que ingresan a sus tierras, previa notificación a los guardias provinciales". ".
Fuente: Informe verde