Caza: La sección provincial de Reggio Calabria di Enalcaccia, a través de una nota emitida por el secretario provincial Antonino Amato, comenta y solicita la intervención de los organismos encargados de modificar la ley de caza 157/92, para otorgar más libertad al cazador. operando en todo el territorio nacional sin más cargos adicionales.
L'enalcaccia, Sección Provincial de Reggio Calabria analiza el estado de salud por el que atraviesa la caza, ante los costes cada vez más desorbitados, las limitaciones, la esclavitud de la libertad y, por último, pero no menos importante, la hacha de caer en las infracciones penales previstas Por arte. 30 Ley 11 de febrero de 1992 n. 157.
Analizando cada punto de la introducción, el escritor observa los costes de los impuestos que debe afrontar cada cazador por la única autorización para practicar la caza, que ascienden a más de 360 euros. Limitaciones que impiden la libertad de caza en todo el territorio, dado que solo el Parque Nacional Aspromonte se ha apropiado de más del 35% del territorio agroforestal-pastoral de la Provincia, mientras que el plan de caza de fauna silvestre prevé un cupo máximo del 24%. A todo ello se suma la confusión de un calendario de caza poco claro con el establecimiento de Zonas Especiales de Protección (ZEPA), que en la pre-apertura de la caza han hecho que las víctimas de los cazadores desconozcan las prohibiciones.
El ejercicio de la actividad cinegética únicamente en el ATC de pertenencia por caza sedentaria y las sanciones penales previstas en el art. Los 30 citados anteriormente manchan un deporte como los infractores, mientras que el mismo artículo podría ser despenalizado estableciendo la cadena perpetua o la suspensión de la portación de un arma para los delitos más graves, con sanciones administrativas para todos los demás delitos.
También se considera injusto no permitir que los cazadores cacen en todo el territorio nacional, como ocurre en la Región de Calabria con sus residentes, con paquetes solo para caza migratoria.
En el espacio de treinta años, los cazadores han disminuido en más del 50%, y con cada año que pasa, los ancianos abandonan y los jóvenes están cada vez menos interesados. Entonces, ¿para qué sirve todo esto dado que en este período de triste recesión el Estado está perdiendo varios millones de euros por una actividad inducida que gira en torno a la caza?
Espero que lo anterior sea objeto de cuestionamientos parlamentarios, que la opinión pública sea menos hostil hacia quienes practican un deporte tradicional, que el cazador no sea objeto de prejuicios, ya que se reconoce la pureza de los antecedentes penales, activistas por los derechos de los animales no hagas falso moralismo.
Se invita a la Sección Nacional de Enalcaccia a evaluar lo anterior y dar respuesta a sus integrantes, quienes aún tienen el coraje de no abandonar.
Strettoweb.com
14.11.2014