cincuenta millones indemnizar a los operadores del sector porcino por los daños causados en sus explotaciones por la Peste porcina africana: decidido sobre ministerio de politicas agricolas con dos fondos específicos: el “Fondo de la parte de capital para intervenciones estructurales y funcionales en el ámbito de la bioseguridad”, con una dotación de 15 millones de euros para el año 2022 y el “Fondo de la parte corriente de apoyo al sector porcino”, con una dotación de 35 millones de euros para el año 2022. Los fondos se establecieron en el decreto Sostegni Ter que acaba de aprobar el gobierno de Draghi. «Agradecemos al gobierno y al ministro Patuanelli por mostrar la atención de las instituciones a la grave situación difícil que vive la ganadería porcina italiana también por la emergencia de la peste porcina africana encontrada en animales salvajes en el norte del país -dice Ruggero Lenti, presidente de Assica, la cadena italiana de charcutería-.
Se trata de una intervención urgente que destina unos recursos primarios tanto para reforzar las medidas de lucha contra la posible propagación del enfermedad veterinaria entre animales e intentar garantizar una compensación a las empresas de la cadena de suministro que ven desvanecerse sus exportaciones debido a los bloqueos cautelares a las importaciones introducidos por algunos países no europeos".
Una primera estimación de daños elaborada por Assica da fe de unos 20 millones de euros al mes pérdidas de la industria; pero si la situación empeorara y se ampliara el número de terceros países que podrían imponer restricciones a nuestras exportaciones, advierte la asociación, el daño aumentaría rápidamente incluso más allá de los 60 millones de euros al mes y en un periodo en el que los costes de las materias primas y los costes energéticos ya absorben recursos más de lo normal, con la pandemia endureciendo sus garras restringiendo el consumo, es fácil entender cómo el equilibrio para la estabilidad del sector y la cadena de suministro está particularmente en riesgo.
«Esperamos que la recursos previstos por el decreto puedan llegar a las empresas de la forma más rápida y eficaz posible, quizás incluso aumentando su dotación, de modo que -concluye Lenti- el alivio lo sientan más las empresas del sector que ya apoyan las graves consecuencias económicas del escenario actual del mercado".