La Confederación de Cazadores de la Toscana ha condenado enérgicamente los escritos ofensivos que han aparecido en los últimos días a lo largo del Carretera provincial Pontedera-Calcinaia. La sección provincial de Pisa denunció amenazas contra cazadores y el consejero regional de agricultura, Marco Remaschi. La escritura es inequívoca: "Remaschi a muerte, cazadores en juego".
La referencia no puede dejar de ir a la Ley Objetiva que prevé la contención de los ungulados en el territorio toscano y muy deseada por el Consejo Regional. CCT expresó su propia solidaridad de manera convencida, recordando cómo la violencia y la intolerancia del cultura anti-venatorial ciudadanos honestos que realizan una actividad legítima y socialmente útil, los cazadores de hecho, no son absolutamente útiles, incluso a expensas de los ciudadanos honestos.
La asociación nunca se ha mostrado partidaria de la Ley Objetivo, pero todo siempre ha quedado circunscrito con la máxima transparencia y absoluto respeto. Los autores de las sentencias, en cambio, fueron definidos en términos inequívocos como "cobardes", capaces sólo de esconderse detrás del anonimato con mensajes sombríos y despreciables. CCT Pisa ha asegurado que en el mundo cinegético siempre habrá un interlocutor franco y directo, además de portador de valores y prácticas marcadas por la paz y la convivencia civil.