La sección regional de Campania de EPS (Autoridad de Productores de Caza) ha realizado varias solicitudes con respecto al próximo calendario de caza, el relacionado con la temporada 2022-2023: "Neto de la Ordenanza TAR de Campania n.3878 / 21 sobre avefría y con la exclusión de el porrón, entre las especies cinegéticas; solicitamos la posibilidad, luego de evaluar todas las condiciones necesarias y suficientes, de capturar la tórtola en pre-apertura, en virtud de la aprobación del plan nacional de manejo de la especie que permitiría capturarla en una cantidad igual a 50% del total de retiros de las últimas temporadas cinegéticas, implementando posteriormente un adecuado plan de muestreo, desde el tercer domingo de septiembre hasta el 30 de octubre.
Hemos sugerido poner en marcha serios "Proyectos de Seguimiento" de la fauna, útiles para los informes sobre los planes de gestión de las especies de interés faunístico cinegético, con el fin de evitar nuevos recortes de los períodos venables y de las bolsas de caza. Para la especie jabalí, de manera compatible con todas las prescripciones adoptadas para la PPA, en atención al particular estado de alarma y al enorme daño causado a los cultivos agrícolas, para proteger y salvaguardar el patrimonio rural y las explotaciones en sentido amplio, implantar todas las formas de caza permitida y no en contraposición a la L. 157/92 y LR 26/2012. Hemos sugerido un muestreo más compatible de la especie del 1 de noviembre al 31 de enero.
Abrir un debate serio sobre el problema de los “Corvidi”. El incremento exponencial de estas especies invasoras está causando graves perjuicios tanto a la fauna menor como a la repoblación con fines de fauna silvestre en el territorio con caza planificada y en el de ordenación cinegética privada. Deben implementarse planes de contención específicos para la especie, nunca en exceso. La caza del faisán también en los Espacios Natura 200 (pSIC, SIC y ZPS) comprendidos en el territorio con caza programada y en los institutos de fauna de gestión privada, no se opone a las prescripciones del VI Estudio de Incidencia. Deberá posponerse hasta el 30 de enero de 2023, según planes específicos de muestreo, elaborados por la ATC y por los concesionarios de institutos cinegéticos de titularidad privada”.