Donde la sequía y el granizo no han hecho daño, ahora la fauna se hace cargo. Varios productores de frutas de verano, desde melocotones hasta sandias, en el área de Baja Romaña, en particular en las zonas de fuerte producción frutícola, de Bagnacavallo a Lugo, de Cotignola a Massa Lombarda, luchando contra fuertes pérdidas de producción provocadas por los ataques de urracas, liebres y nutrias. El mayor daño se puede ver en la sandía con los cultivos en gran parte tirados a la basura debido a los frutos perforados y roídos por los animales que se dan un festín sin ser molestados incluso durante el día.
Él sabe algo domenico antonellini, productor hortofrutícola bagnacavallese: "Ya durante la siembra, en primavera, notamos un aumento en la presencia de córvidos -dice- fue duro pero defendíamos los cultivos de hortalizas con los dientes, lamentablemente poco o nada podemos hacer hoy contra los ataques de liebres y nutrias que devoran cada día nuestras sandías».
Y mejor no a los fruticultores, desde la ciruela hasta el melocotón, que se comprometen a diario en la defensa de la maduración de los frutos en ramas de los huertos de urracas y cuervos y pájaros carpinteros. "Coldiretti Ravenna - denuncia el director Assuero Zampini - ha iniciado un seguimiento de los daños entre los integrantes de las áreas afectadas por la proliferación de fauna con el fin de iniciar el proceso de reportar el daño que a pesar de los controles puntuales y las preguntas periódicas les resulta difícil ser compensados satisfactoriamente "(Rávena y alrededores).