mucha buena voluntad, mucho amor por el bosque y profundo conocimiento de la zona. Estos son los ingredientes en la base de la hermosa iniciativa llevada a cabo por Cazadores de Montemurlo quienes en los últimos días han dedicado su tiempo a limpiar y luego reabrir un viejo camino. Se trata vía Maremmana, el camino montañoso utilizado por los pastores para transitar hacia la Maremma con sus propios bandadas en los primeros años del siglo pasado. El camino infestado de malas hierbas y zarzas y, por lo tanto, ya no practicable durante algún tiempo, cruza el área de Volpaie y discurre a lo largo del tramo montañoso detrás de Villa Pancrazzi.
Ahora que los cazadores han despejado el camino de la montaña y lo han hecho viable. todos pueden pasar y disfrutar del espléndido panorama. Un bonito regalo no solo para las colinas, sino también para todos los Montemurlesi a los que les encanta caminar. No fue una empresa fácil, pero la buena voluntad de los cazadores de Montemurlesi tuvo éxito en la empresa. devolviendo un antiguo camino abandonado a los ciudadanos. Un primer trozo de un camino anticipado por el teniente de alcalde y concejal para la promoción del territorio, Giuseppe Forastiero, quien anunció que 2022 será el año de los paseos con la inauguración del anillo de senderos tematicos en la colina de Montemurlese.
Mientras tanto, para los amantes de las excursiones, el territorio de Montemurlo ya ofrece un tramo del camino del Cammino di San Jacopo. frecuentado por numerosos peregrinos tras las obras de restauración financiadas por la Región. El camino atraviesa el espacio protegido de Monteferrato, subiendo al Monte Lopi, el punto más alto de la etapa. Luego continúa en medio del campo en Via Baronese, tocando la histórica Villa del Barone, luego sube hasta el pueblo de Rocca donde se encuentra la milenaria Pieve di San Giovanni Decollato, llegando hasta Agna, en la frontera con Montale, tocando otros tabernáculos históricos como el de Piazza Don Milani o el de Campo Santo, a lo largo de Via Montalese, vinculado al milagro de la Cruz. El camino de San Jacopo está indicado con dos frisos de amarillo y naranja que indican el camino a seguir, tal como ya sucede por ejemplo para los caminos Cai (Nazione).