Diez días de caza anticipada para satisfacer las necesidades de los agricultores. Esta es la razón que motivó la Provincia de Belluno para comenzar la temporada de caza el 21 de agosto en lugar del XNUMX de septiembre. “Hace unos días me paró un campesino de Limana y me dijo que había encontrado nueve en su milpa ciervo empeñados en comer maíz en mazorca», comienza Franco De Bon, el consejero provincial con competencias en materia de caza y pesca. “Y esto es solo un ejemplo de lo que ocurre casi a diario en nuestra provincia con la fauna salvaje: estamos hablando de ciervos, pero también de jabalíes. Por ello pedimos poder anticipar el inicio de la temporada de caza de ungulados". A partir del domingo, por lo tanto, los cazadores podrán comenzar a cazar ciervos hembras y jóvenes.
La elección de apuntar a estos animales se hizo hace algunos años en Territorio Belluno, con luz verde también desde Ispra: "Pedimos a los cazadores de nuestras reservas", apunta De Bon, "que salgan en los próximos días y se concentren en las zonas cercanas a los campos de cultivo para molestar animales con la intención de comerse la cosecha". Asustándolos, pero también recortando algún "maldito tiro", para mantener alejados a los animales: "Nuestro objetivo", explica De Bon, "es doble: mantener la población de animales salvajes dentro de ciertos números durante género y clase de edad, sino también para asegurar la conservación y la futura reproducción.
Incluso si comenzamos temprano, de hecho, la temporada de caza se interrumpirá. de mediados de septiembre a mediados de octubre para la temporada de apareamiento entre los ungulados». Para estos animales, pero también para los córvidos, urracas y otras aves dañinas para los cultivos y el ganado, el número a matar se divide por una sola reserva: «Una vez alcanzado el número dado, se detiene la caza. Esto es para garantizar su propia reproducción»» dice De Bon. El consejero provincial se muestra satisfecho con los resultados obtenidos hasta el momento: «Con el plan cinegético puesto en marcha el año pasado, hemos visto que la población salvaje se ha estabilizado. Esto significa que el método diseñado para mantener el equilibrio faunístico y ambiental funciona, pero también para evitar la propagación de enfermedades cómo puede ser la peste porcina africana, que se transmite entre los jabalíes».
De Bon también desea subrayar «el buen trabajo que están haciendo los cazadores para el censo de vida silvestre. Nuestros policías provinciales se reducen a los términos mínimos, tanto es así que ahora se han asignado algunas actividades a los cazadores. A fin de mantener a los agentes a cargo únicamente del control de esta actividad». Pero también hay otra novedad: se trata de la reservas de juego. Según la nueva ley veneciana sobre la materia, el consejo de cuentas, antes integrado por accionistas de esa reserva, será sustituido por un solo auditor.
Un profesional (abogado o contador) que deberá estar inscrito en un registro específico habilitado en el Ministerio de Economía y Finanzas: "Si por un lado impondrá mayores costos para las reservas, esta regla impedirá que quien lleva las cuentas sea también quien las redacte», explica el consejero provincial debona. “No debe haber mezcla de tareas. El auditor único puede ser miembro de la reserva pero no puede ser miembro del comité de dirección que es el órgano que decide los gastos” (Mensajero de los Alpes).