Caccia: Carta abierta al ministro Brambilla.
Querida Michela Vittoria;
recordará muy bien, amable ministro, lo ocurrido en mayo de 2008. Fue un récord para Silvio Berlusconi, cuando dio a conocer la lista de los integrantes del equipo de su cuarto gobierno luego de la entrevista en el Quirinal con Giorgio Napolitano, que duró una hora y 15 minutos.
Il Cavaliere aceptó la tarea de formar un nuevo gobierno conferido por el jefe de estado presentando la lista de ministros. 'Estoy satisfecho con el equipo de gobierno: hay muchos nuevos ministros y hemos mantenido el compromiso de las cuatro mujeres', radiaba el Caballero al salir del Palazzo Madama. Ciertamente todos dieron tu nombre también, Michela Vittoria. El Ministerio de Medio Ambiente parecía ahora un logro adquirido.
Y en cambio, al final, Berlusconi eligió a otra 'bella' diputada, Stefania Prestigiacomo, dejándote solo a ti que, hasta unos meses antes, eras su alumna.
Verás, querida, no basta con amar a los animales para ser ministro de la República; y ni siquiera si te hubieran asignado aquello por lo que tanto te esforzaste, el del Medio Ambiente. ¡Imagínese lo que le hubiera pasado a los Hombres del Bosque si en estos dos años de gobierno, en lugar de su rival de falda, hubiera sido usted, Michela Vittoria! Oh Dios mío, de lo que surgió del histórico episodio de 'Porta a porta' en febrero de 2010, no es que para nosotros el juego sea mucho más color de rosa que el de un Ministro de Medio Ambiente que declara en directo por televisión a todos los italianos. , cazadores entendí que estoy en contra de la caza, que ya nos preocupa tanto. De hecho, mucho. Pero cómo decir: tener que cortarse un brazo…. mejor cortarte 'solo' tu mano.
Pero quiero contactarte. Su departamento se ocupa del turismo. ¿Sabes que todos los que no amas también se benefician del aparato burocrático del que estás en nómina? Pregúntate qué es el 'turismo de caza', y verás que la respuesta también la pueden proponer todas las trattorias, hoteles, bares, gasolineras e incluso los ATC (¡maldita sea!) ¡Que cuentan con nuestra pasión! Porque si tienes un sombrero de mando en la cabeza, no debes olvidar que los ciudadanos, votantes o no, pagan ese sombrero por ti, y por tanto también todos los que van de caza, por turismo o por placer. Ser ministro de la República es un asunto serio y no basta con acariciarle las orejas a un burro en la televisión en directo, por graciosa que sea.
Para ser considerado "de campo libre" uno debe ante todo ser respetuoso de la diversidad de los demás, de las especificidades, del campo, de las tradiciones de la propia gente y del país de uno. Es necesario saber, tout court, que una carpa nunca podrá casarse con un babuino y que una liebre no es un conejo.
Es necesario, en otras palabras, que un ministro de todos los italianos, especialmente en un departamento como el tuyo, MUCHO MÁS CERCA de lo que te imaginas de aquellos a quienes insistes en denigrar, los cazadores, haya impresionado bien el conocimiento y las diferencias entre protección y conservación. , desarrollo y necesidades territoriales, ecología humanística y conservación de la naturaleza a través de su uso duradero. En una palabra, como jefe de un departamento dedicado a los italianos, tendrás que esforzarte por comprender, sobre todo, a todos aquellos (¡y hay muchos!) Que no piensan como tú.
Sería suficiente que tu, Michela Victoria, además de la barra de labios y la base teñida que tanto te gusta, rociaste aquí y allá un poco de talco. Así, para deslizarse mejor dentro de la sabiduría popular que, como todos saben, ha sugerido desde tiempos inmemoriales que comprender al hombre y sus sueños a menudo significa comprender también sus acciones y obras.
Ministro Brambilla, aunque con las necesarias referencias léxicas derivadas de la diferencia estética y femenina que te diferencian claramente de nuestra querida Primera Ministra, acabaré escribiendo las mismas cosas también al 'catador de mascarato', al 'sumiller de nuestra política local' . El mismo que, en un momento de reflexión tardía, quiso premiar tu olvidada lealtad, a la manera de León X y que, como él, 'cumplió treinta' acabó, por así decirlo, por 'hacer treinta y uno'.
Porque no me gustó, ya sabes, el agradecimiento que te dirigió el premier con su carta del pasado 29 de octubre, motivándolo con las palabras 'Te felicito por la salvaguarda de los recursos naturales italianos llevada a cabo por el Ministro Brambilla y por las asociaciones Enpa, LIPU, Animalistas italianos, Fare Verde, LAV y Lega del Cane '-ndr-.
Y ni siquiera a todos los fanáticos de Diana que continúas golpeando con impunidad no les gustó. Si bien no se reconocen de ninguna manera en el 'lobby cazador extremista' (como se definieron a raíz de la misma carta del 29 de octubre), siguen siendo ciudadanos. Ciudadanos que fatalmente - tarde o temprano - irán a votar.
Dr. Sergio Gunnella
- Como recibo publicado -