Según lo anunciado por la sección provincial de Macerata de la Federación Italiana de Caza, el jabalí está aumentando en términos de consistencia numérica, ya que el potencial reproductivo es muy alto. Cada camada garantiza de 4 a 7 niños, sin olvidar la tasa de crecimiento anual promedio de la población, entre el 90 y el 180%. Los ungulados por tanto superan sin problemas los inviernos más duros y comen bellotas y hayas que encuentran en gran número.
El impacto de la vida silvestre en la agricultura es inevitable, así como en la biodiversidad. Además, Los accidentes de tráfico son otro problema común en muchas regiones italianas.. Federcaccia Macerata recordó cómo se permite la actividad cinegética de esta especie en el período del 1 de octubre al 31 de diciembre o del 1 de noviembre al 31 de enero. El manejo del jabalí es impensable sin una correcta recolección por parte de cazadores que explotan la caza cazada, torneada o por selección.
Un memorando final de la asociación provincial tiene que ver con la salud: Todos los jabalíes sacrificados deben someterse a un control de salud preciso y adecuado., obligatorio para evitar cualquier riesgo. El consumo de carne es de hecho un aspecto que nunca debe subestimarse, dado que los ungulados pueden verse afectados por enfermedades bastante grave como tuberculosis o trichinella.