Arci Caccia: en Turín una conferencia sobre la gestión del patrimonio de la vida silvestre, con ambientalistas, cazadores, técnicos, investigadores.
El viernes 10 de mayo, en la Fabbrica delle "E", sala 8 de marzo, corso Trapani 95, ambientalistas, cazadores, técnicos de vida silvestre e investigadores universitarios discuten sobre un nuevo modelo de manejo de vida silvestre y ambientes naturales que devuelve un tema al lecho científico que debe pertenecer a todos los ciudadanos. Por la mañana se programan intervenciones sobre los modelos de gestión de los animales salvajes y sus entornos.
Por la tarde, se realizará una Mesa Redonda para indicar a la política un camino a seguir para la gestión del bien común-fauna, a la que asistirán: Massimo Buconi, Vicepresidente Nacional Federcaccia; Riccardo Fortina, presidente de WWF Piedmont; Antonino Morabito, Gerente Nacional de Vida Silvestre Legambiente; Giovanni Rolle, director de gestión de la fauna de Coldiretti Turín; Osvaldo Veneziano, presidente nacional de Arci Caccia; Dario Zocco, Director del Parque del Río Po y Orba. El punto de partida es un documento elaborado por un grupo de expertos en temas ambientales que decidieron reunirse para discutir un acercamiento a la vida silvestre y los temas naturalistas de acuerdo con un ambientalismo científico.
El documento relanza la gestión de la vida silvestre y fue firmado por gran parte del mundo técnico-naturalista piamontés comprometido día a día con el estudio de la naturaleza, con su conservación, con investigar los problemas de su gestión, con sugerir reglas a la política para salvaguardar un patrimonio, de hecho , de todos nosotros los humanos.
Ese documento pretende ser la base de una discusión abierta entre el mundo ambientalista, el mundo científico-universitario, los parques, la agricultura, el mundo cinegético y la política. El supuesto es que la ley considera a los animales y al medio natural como bienes indisponibles del estado y, por tanto, de las comunidades.
Superar el estéril contraste emocional entre el animalismo y los comodificadores de la vida silvestre es el camino a seguir si queremos mantener nuestro patrimonio de vida silvestre en equilibrio con el resto del patrimonio natural. Un ecologismo que no sigue de una manera al animalismo sino que se ocupa de la gestión de este patrimonio colectivo de forma científica y pragmática es el único capaz de proteger verdaderamente la naturaleza y dársela a las generaciones posteriores de humanos. Un ambientalismo que reconozca plenamente la tarea de preservar y cultivar la naturaleza es el único capaz de impulsar políticas concretas para la restauración de los ecosistemas y su mantenimiento.
El evento del fallido referéndum regional sobre la caza, que encendió el debate político en la primavera de 2012, dejó claro a todos que los temas relacionados con la gestión de los entornos naturales no pueden dejarse a enfoques emocionales y afectivos que nada tienen que ver con la lógica. de naturaleza y que se alejan de las políticas de mejora y gestión activa.
De ese choque que no dejó ni ganadores ni perdedores, se corre el riesgo de generar un estancamiento donde solo la naturaleza y los animales salen perdiendo. Del miedo que se ha generado a volver a quemarse con temas relacionados con la protección de la fauna y su manejo, la política solo corre el riesgo de paralizarse.
Caza Nacional Arci
(8 de mayo de 2013)