Piergiorgio Fassini, vicepresidente deArci Caccia del Véneto, se dirigió a la Región para aclarar la extensión del prohibición de las actividades de caza en algunas áreas. Aquí está el texto de la carta: "Consideramos la extensión de una semana más de la prohibición de caza en todo el Provincia de Belluno y en la zona de los Alpes perteneciente a la provincia de Vicenza. La medida adoptada, a pesar de la complejidad de la situación de emergencia que se ha presentado en algunas zonas de la región del Véneto, parece demasiado genérico más que del análisis cuidadoso de las situaciones locales existentes.
Podemos estar de acuerdo en que en las zonas más afectadas por el mal tiempo podemos mantener la prohibición temporal de la caza, cierre necesario para garantizar la protección de la vida silvestre, pero también para la seguridad de todos los ciudadanos y, por lo tanto, la prohibición debe extenderse a los visitantes de los bosques y valles (cazadores de setas, excursionistas, etc.). Pero creemos que si solo se menciona la prohibición de la caza, esta debe implementarse solo en los territorios donde la situación es realmente una emergencia para la fauna y el medio ambiente. Hay territorios enteros en los que no hay riesgo ni para el medio ambiente ni para la fauna., pero la caza permanece cerrada.
Por tanto, pedimos que, si se prorroga la prohibición de caza, se haga para las zonas realmente afectadas por los fenómenos meteorológicos de los últimos días y, por tanto, para las zonas claramente identificables que se encuentran dentro de las Reservas Alpinas o partes de ellas. Por ello pedimos a la Región, en colaboración con las oficinas cinegéticas de las Provincias y los directores de la Zonas alpinas, eliminar y abolir la veda generalizada de caza para las zonas de la Zona Alpina no afectadas por el desastre medioambiental de estos días, y que a partir de mañana volveremos también a estas zonas practicar la caza con normalidad, como ya es el caso en el resto del Véneto. Entendemos que en un momento complejo como este, la caza legítimamente pasa a un segundo plano para las instituciones, pero no podemos aceptar para los cazadores que representamos que esto pueda ser una limitación grave e injustificada en el ejercicio de sus derechos ”.