La caza de Frodo: El bombardeo en la provincia de Parma contra los cazadores de liebres fuera de la ley. Los hombres de la Guardia Forestal denunciaron a siete personas, pellizcadas en Roccabianca (PR), con transceptores y rifles. Además de los dispositivos, que no se pueden utilizar durante las cacerías, los números de serie del marco de acción de algunas armas no coincidían con los del cañón.
Así, los siete cazadores furtivos, que residen en varios pueblos de la provincia, terminaron en un mar de problemas. Además de ser denunciados por cazar con medios no autorizados, corren el riesgo de una multa de hasta 1.549 euros. También se desencadenó la incautación de los radios bidireccionales y rifles y los siete fueron denunciados a la Jefatura de Policía para posibles medidas sobre la suspensión de la licencia para portar un rifle para uso cinegético.
Pero vayamos en orden. Los cazadores, todos entre 45 y 60 años, residen en diferentes localidades de la provincia: Roccabianca Sorbolo, Fornovo, Soragna y Zibello.
Juntos para una broma de fin de semana fueron atrapados en el campo de la Bassa, una zona muy atractiva, lamentablemente también para los cazadores furtivos. Armados hasta los dientes, continuaron en contacto para rastrear a los animales y golpearlos comunicando posiciones y avistamientos por radio. El operativo Forestal, en colaboración con la Policía Provincial, duró varias horas. Además de vigilar a los cazadores furtivos con una larga vigilancia, los agentes sintonizaron las frecuencias de radio de los cazadores de liebres para atraparlos.
Una vez alcanzados, los cazadores furtivos fueron identificados. Un cazador furtivo intentó restarle importancia, otros incluso negaron la violación del rifle. pero como funciona? Las radios bidireccionales están prohibidas por la ley que regula la caza, con la excepción de la caza de jabalíes cazados o cazados. En el último caso, de hecho, los dispositivos solo están permitidos para conexiones organizativas entre los cuidadores de perros y los capataces.
Todo esto para garantizar su seguridad y protección. Claramente, el transceptor sigue siendo una herramienta muy popular entre los cazadores furtivos. “Es un dispositivo muy sencillo de encontrar - explican los expertos - con un precio modesto y objetivamente muy fácil de usar”. Es imposible recitar cifras precisas, pero no son pocos los astutos que optan por este "atajo".
Lo cierto es que los mandos de los hombres de la Guardia Forestal continuarán al son de tambor durante toda la temporada.
16.10.2013
Chiara Pozzati - Gazzetta di Parma