El comportamiento del consejo.
El 22 de diciembre la Región de Emilia Romagna renunció definitivamente a defender lo poco que quedaba de la calendario de caza 2023/2024. Nos hicieron creer que mantendrían el listón recto para defender sus elecciones iniciales sobre el calendario de caza e instaron al TAR, ante la insistencia del mundo de la caza, a celebrar la audiencia a tiempo para restablecer el calendario inicial. Un TAR que ni siquiera respeta el fallo del Consejo de Estado en el que se solicitó que se fije la audiencia para discutir el fondo del recurso presentado a finales de diciembre. Con un comportamiento absolutamente inaceptable, en más de dos meses no se ha hecho nada para intentar formular un acto con un mínimo de valentía política para salvar lo que se puede salvar. No ha habido ningún compromiso de dar un mandato al aparato técnico para desarrollar una disposición lo que, valorizando los datos recogidos con el seguimiento de la becada, salvaguardaría al menos este muestreo en el mes de enero, del mismo modo que no se utilizaron los datos científicos sobre otras especies proporcionados por las asociaciones de cazadores.
La reacción de los cazadores.
Es descorazonador comprobar la vergonzosa actitud de la política regional que ni siquiera es capaz de defender lo que decidió en su momento y al mismo tiempo cree utilizar a los cazadores como carroñeros en planes de control de especies invasoras o dañinas para la agricultura y el territorio. . Los cazadores no se conforman con la "promesa" de una vergonzosa dádiva con la reducción del impuesto regional, lo que piden es la certeza de las normas para toda la temporada de caza. Del mismo modo que, al mismo tiempo, la Región regala coches y mucho dinero a asociaciones que no hacen nada por la protección del medio ambiente y de la fauna, salvo imponer prohibiciones y limitaciones absurdas que con el tiempo resultan ser un verdadero desastre, como ha ocurrido recientemente en la Zona de Romaña.
Usado y explotado
Un calendario que se modifica continuamente durante la construcción ya no es aceptable, es un sistema que conduce al abandono sistemático por parte de los cazadores, pero quizás el chantaje medioambiental/político hacia el consejo regional quiera precisamente eso. Los cazadores están cansados de ser utilizados y explotados, sólo piden ejercer su pasión según las normas de la legislación nacional. Por tanto, no sorprende el descenso del voluntariado en el control de especies oportunistas y en las acciones de gestión del territorio y tampoco lo es la señal que el mundo cinegético y las industrias afines que giran en torno a la caza podrán dar en los próximos plazos electorales oportunos. (El Presidente Provincial Libera Caccia Ravenna Bruno Gurioli – El Presidente Provincial F.I.d.C. Ravenna Dante Gianstefani – El Presidente Provincial Enal Caccia Ravenna Avv. Carlo Benini).