De acuerdo con los informes de Lucía Venturi, presidente de la Parque Regional de Maremma, en esta zona de la Toscana i verracos disminuyeron en un 50%, mientras que en lo que respecta a i gamo se registró un -40%. Los números se refieren al área protegida y según el propio Venturi son el resultado de los planes de contención adoptados por el organismo. El presidente quiso traer algo de claridad más tarde algunos rumores que habían mostrado una situación completamente diferente.
El problema existe, pero el Parque Maremma recordó el plan que se aprueba cada año para el manejo de la vida silvestre. Además, las extracciones, matanzas y capturas hacen uso de la contribución del comité científico. La disminución de ungulados se ha registrado desde 2010 hasta la actualidad. Con una estimación numérica, si hace ocho años los jabalíes estaban entre 1600 y 2 mil cabezas, hoy han bajado a 800-1000. En cuanto al gamo, por el contrario, pasó de 1200 a 750 unidades.
Como resultado, el daño causado por los animales salvajes a los cultivos agrícolas es menor, ya que ambos buscan constantemente alimento. Venturi destacó la compensación del 100% que se reserva a los agricultores en caso de cultivos devastados, incluso si las superficies involucradas han caído gracias a la contención mencionada anteriormente.