Periodo negro para el compositor manduriano Fernando Arno. Tras las esposas en vísperas de su concierto ambiental, con la posterior identificación en la comisaría de Manduria y la sanción administrativa por haber realizado parte del evento sin estar autorizado, para hacer que los papeles hablen en su contra ahora son los cazadores.
Cuatro de ellos que durante una broma cerca de la finca del artista habían estado en este filmado y publicado en Facebook, se dirigieron al Fiscal de Tarento pidiendo procesar al maestro. El abogado Giuseppe Brunetti, a quien uno de ellos recurrió, pide a Arnò que investigue delitos de insulto y violación de la privacidad. En los últimos días, el artista había filmado a un grupo de cazadores con su teléfono móvil, acusándolos de haber disparado en un área prohibida y conscientes, según él, de tres perros de su propiedad que habían sido baleados, los invitó a que se fueran.
Las imágenes y el audio de la discusión que surgió luego terminaron en la página personal de la red social del músico alimentando una discusión colorida. De ahí la acusación de insultos que denuncian los molestos demandantes que en el informe de la demanda solicitan que los autores de algunos publicaciones particularmente ofensivas (La Voz de Manduria).