Con la temporada de caza archivada, es el momento de hacer balance e impresiones, pasando a la denominada “Cacería hablada”.
El presidente del Comité Ejecutivo Nacional de Anuu Migratoristi, Massimo Marracci, expresa sus consideraciones sobre la temporada de caza que acaba de terminar y sobre la caza como una pasión ancestral proveniente de la naturaleza más remota del hombre que ciertamente no termina al final del temporada.
El discurso de Marracci en el diario BresciaOggi.it es el siguiente: “La temporada de caza 2011-2012 también ha quedado atrás, cubierta de nieve y hielo helado como gran parte de nuestro país estos días. Cada uno de nosotros, sin duda, ha vivido muchos momentos inolvidables, marcados por alegrías, decepciones, expectativas, búsquedas, inmersos en la naturaleza y olvidando desde hace algún tiempo el frenesí y las urgencias que la vida "civil" nos derrama cada día.
De hecho, la caza es también un escape de todo esto, una forma de volver al menos temporalmente al estado primitivo del hombre. Hoy ciertamente contamos con todos los equipos y accesorios más modernos para realizar nuestra actividad, pero el núcleo del desafío entre el hombre y el animal se ha mantenido inalterado así como, suponemos, las emociones que se sienten antes, durante y después de eso han permanecido. sin cambios a lo largo de los milenios, el desafío se ha agotado.
No en vano, hablar de la caza con quien no la conoce y no la practica suele ser difícil porque no pocas de las "justificaciones" que podemos dar derivan de aspectos emocionales, por tanto irracionales, que como tal deben ser vividos en para ser entendido.
Muy bien, y real, hablar de manejo, control de especies, mejora del hábitat, generación de ingresos, contribución a las investigaciones científicas y cualquier otra cosa que pueda enmarcarse en un razonamiento lógico y lineal, pero esto, aunque mucho, no es todo.
A partir de hoy, por tanto, se reanuda la caza hablada, que sin duda y como siempre tendrá mucha carne que prender fuego para la próxima temporada: aunque consideremos efímero cualquier resultado no sustentado en una sólida recuperación de la credibilidad de nuestro mundo. respeto a la sociedad civil y las propias instituciones.
Así que guardemos bien en la memoria los recuerdos que nos ha dejado la temporada que acaba de terminar, porque nada garantiza que la próxima sea mejor, aunque trabajemos para al menos evitar que sea peor. ¡Adiós querida caza! Massimo Marracci ".