Caza furtiva: El jorobado dispara a los cazadores furtivos capturados en el lecho del río Alento con armas modificadas y un jabalí caído. Los guardias de la ENPA, después de haber sorprendido a los cazadores furtivos, llamaron al Cuerpo Forestal del Estado, Asl y Carabinieri en lo que a ellos respecta.
Después de horas escuchando los movimientos de los cazadores furtivos, los guardias de la ENPA de Salerno interceptaron y sorprendieron a algunos cazadores dentro del cauce del río, cerca de la presa de Alento que limita con el Parque Nacional Cilento y Vallo di Diana. La operación se extendió luego a las áreas vecinas, permitiendo así la identificación de otros dos sujetos. El primer grupo había matado recientemente a un jabalí fuera del período permitido. De hecho, los cazadores pueden cazar ungulados solo los jueves y domingos.
El operativo se inició en las primeras horas de la madrugada y se prolongó hasta las primeras horas de la tarde y contó con la participación de dos equipos encabezados respectivamente por el subjefe del núcleo Alfonso Albero y por el agente Rocco Caiazza. Y es precisamente el equipo de este último el que, tras escuchar los disparos a corta distancia, utilizó la vegetación para acercarse sigilosamente y atrapar al grupo de cazadores furtivos con las manos en la masa mientras arrastraban a la presa abatida hacia un área protegida.
A la llegada del equipo, algunos cazadores intentaron escapar, pero los guardias se les unieron. "Desafortunadamente, a nuestra llegada, el jabalí ya había sido asesinado, pero al menos logramos golpearlo con fuerza", son las palabras del agente Caiazza, "la caza furtiva es una dura realidad y también es difícil morir". Además de la caza furtiva, hay que sumar el uso de munición no autorizada y la alteración de algunas de las armas en posesión de los sujetos. En el control, de hecho, se modificaron dos escopetas ya que se habían quitado los reductores, lo que permitió que el tanque almacenara más cartuchos de los permitidos por los dos. Solo un sujeto no pertenece al grupo de los jabalíes. Este último había aparcado y estaba cazando en la zona del Parco del Cilento con la ayuda de dos señales acústicas electromagnéticas, prohibidas por la ley.
La ASL competente intervino sobre el terreno para realizar los controles y análisis del jabalí. La fase final del operativo se llevó a cabo en las oficinas del Cuerpo Forestal de Vallo della Lucania, donde se registró a los sujetos por cacería en área protegida, caza de jabalí fuera del período y uso de municiones y armas no permitidas. Se incautaron así siete (7) fusiles, unos trescientos cincuenta (350) cartuchos entre munición de una sola bala, perdigones y perdigones, radio, dos retiros electromagnéticos y el jabalí abatido. La ENPA de Salerno agradece al Cuerpo Forestal del Estado y al personal médico de la ASL por su rápida intervención y al comandante del Vallo della Lucania carabieri, siempre diligente y preciso, y subraya que la caza del jabalí está cerrada este año y lo controla. El tipo de caza será cada vez más frecuente a partir de hoy.
29.12.2014