Tras la creciente presencia de jabalíes en zonas urbanas, también ispra ha emitido algunas reglas a seguir, también destinadas a recordar que el jabalí no es una mascota y que ciertos comportamientos, como alimentarlosAdemás de prohibidas por la ley, también son riesgosas. Ispra nos recuerda que proporcionar alimentos es una práctica absolutamente desaconsejable, porque favorece el hábito de estos animales a los humanos con potenciales riesgos para las personas, sin olvidar que este comportamiento también implica riesgos para los propios animales.
Cabe recordar que la presencia de jabalíes en zonas urbanas está íntimamente ligada a la disponibilidad de desperdicio de alimentos y desechos orgánicos para este animal salvaje. El jabalí es, por naturaleza, un animal salvaje y puede reaccionar a la interacción mordiendo o empujando violentamente. Además, esta asistencia implica riesgos para las mascotas - perros y gatos - que pueden ser atacados por jabalíes con incluso consecuencias graves. Al facilitar la presencia de jabalíes cerca de carreteras y hogares, no debe subestimarse el riesgo de accidentes de tráfico que puede causar cruzarlos.
Tenga en cuenta que el forrajeo de jabalíes está expresamente prohibido por el Ley 221 / 2015 que prevé, para quienes incumplan esta prohibición, arresto de 2 a 6 meses o multa de 500 a 2.000 €. Para la ciudad de Roma existe una ordenanza específica de 2016 que ordena "no distribuir comida a palomas, gaviotas y otros animales pertenecientes a la vida silvestre en espacios públicos ”sancionable con una sanción de 50 a 500 €.