la estrategia nacional
A pesar de las prohibiciones impuestas desde enero de 2022 en áreas infectadas con Peste porcina africana para todos los amantes del bosque, no solo para nosotros los cazadores, la enfermedad ahora está presente en seis regiones italianas, incluida Lombardía. La estrategia nacional puesta en marcha por las instituciones y por los Comisionados Extraordinarios designados ad hoc no parece conducir a una rápida erradicación de la enfermedad ni siquiera a prevenir la propagación del virus, dado el frente de constante avance. La propagación arrasadora del virus, que parecía fuera de control durante la primavera, se ha ralentizado hasta la fecha, probablemente por la menor movilidad general de la especie, tanto por la época del año como por la tala y en algunas zonas infectadas, incluida la zona de Pavía, eran numerosos. Sin embargo, esto no debe bajar la alerta porque, si la enfermedad llegara incluso a tocar áreas con una alta concentración de cerdos, el impacto para la producción porcina sería devastador.
Lo que ha hecho la Región de Lombardía
La Región de Lombardía, consciente de ello, siguió de cerca la historia: en el último año y medio, la colaboración entre la unidad organizativa Veterinaria de la Dirección General de Bienestar del Consejero Bertolaso, la Dirección de Agricultura del Concejal Beduschi con el área de Pavía, primero tocó y luego golpeó por el PSA, era evidente. Gracias a la contribución del mundo cinegético de Oltrepò Pavese, se han logrado objetivos importantes en un intento de frenar al máximo la enfermedad. Esto se logró a través de la conjugación local de las numerosas leyes y planes de emergencia emitidos, a veces de manera caótica, por los órganos de gobierno. Los elementos normativos recientemente emitidos fueron los Planes Regionales de Intervenciones Urgentes (PRIU), el plan extraordinario para la gestión y contención de la fauna silvestre y el plan extraordinario para la captura, sacrificio y disposición de jabalíes a nivel nacional así como las ordenanzas del Comisionado de PSA. Reglas, objetivos, métodos y medios diferentes para cada plan que tiene como objetivo la gestión del jabalí, en lugar de la PPA, y que sólo en ocasiones parecen hablar el mismo idioma. El único elemento en común es una declaración de guerra contra la especie jabalí. Este contexto, si no se rige rígidamente desde el nivel central, generará un caos en torno al manejo del jabalí que solo beneficiará la propagación de la PPA.
Manejo del jabalí
De hecho, las normas han pasado de intentar erradicar la PPA a dictar nuevas normas para el manejo del jabalí en todo el país, no solo en las zonas infectadas. Incluso se ha creado una nueva figura, la del biorregulador. “Los sujetos autorizados por la legislación vigente para practicar la caza con formación específica en el campo de la bioseguridad -dice la ordenanza- (…) durante el período de aplicación de los planes de erradicación de la peste porcina africana (…) asumen la función de biorreguladores y podrá registrarse en el correspondiente listado nacional de Biorreguladores activados en el portal de sistemas de información veterinaria - Vetinfo, al que las autoridades locales competentes podrán recurrir para actividades de contención de la especie jabalí en todo el territorio nacional”. La autoridad local competente podrá recurrir a la lista nacional para designar biorreguladores para sacrificar jabalíes incluso en áreas de caza, donde no se han alcanzado los objetivos mínimos de recolección. Estos objetivos mínimos deberían formalizarse con el “Plan extraordinario de captura, sacrificio y eliminación de jabalíes” y, dada la guerra abierta contra el jabalí, no creemos que sean numéricamente bajos y fácilmente alcanzables.
orden del comisionado
El marco normativo se completa con la Ordenanza n.2/2023 del Comisionado de la PSA, en revisión porque vence a fines de agosto, que regula las actividades en los territorios infectados. Si el objetivo de erradicación de la peste porcina africana ya no es alcanzable, esperamos que la nueva Ordenanza contenga reglas que permitan que la próxima temporada de caza transcurra con la mayor normalidad posible y al mismo tiempo pueda dar a la Región herramientas y recursos para poder contrarrestar el avance del PSA de manera incisiva. En este contexto, debemos apoyar a nuestros compañeros de Pavía en la lucha contra esta enfermedad cuyas repercusiones son ciertamente devastadoras para la ganadería porcina y para toda la actividad cinegética. Esperamos, y le pedimos a la Región que siga desenredando la madeja de las normas nacionales para darnos elementos claros para ponernos a disposición de las autoridades sanitarias. (FIDC BRESCIA – CAZADORES DE PENSAMIENTO)