El alcalde de portoferraio, creemos que con la más noble intención de salvaguardar la economía de todo el sector de la ganadería porcina, cogió papel y lápiz y, como de costumbre, se deslizó de inmediato por el traicionero terreno de demagogia y moda animalista, golpear, ante todo, no tanto la caza sino uno de los aspectos deportivos ligados a ella como es la caza canina. Según el alcalde del primer municipio por población y segundo por extensión de laIsla de elba, “… Era necesario y urgente adoptar de inmediato medidas para el control y prevención de la enfermedad en los jabalíes y para protección de cerdos criados.
Todo ello con el fin de evitar la previsión de prohibiciones de uso de los bosques y caminos, a pie o con vehículos a pedales y, en general, de todas las actividades recreativas que se realicen. fuera de las zonas urbanizadas... "En palabras más simples:" Ya que no podemos prohibir el trekking, el ciclismo de montaña, la caza de hongos, etc., mientras tanto, empecemos por prohibir el canino"! Lástima que el alcalde no sepa que este terrible flagelo de la PPA se propaga, también y sobre todo, pisoteando suelo posiblemente infectado, trayendo a casa (y cerca de granjas porcinas) un virus que tiene la propiedad de permanecer activo durante mucho tiempo.
Por eso, el peligro de propagar el patógeno no es tanto el movimiento de los animales sino precisamente la frecuentación humana de lugares posiblemente infectados. Por ello, nos gustaría pedir al querido alcalde que reconsidere su disposición que, no solo parece inoportuno ya que es un territorio insular, pero en todo caso es injustificado e injustamente punitivo contra una sola categoría de ciudadanos (Fuente: Asociación Nacional de Caza Libre).