Hace unos días fue aprobado oficialmente por la Senado francés la ley que prevé el delito de perturbación de la caza, un texto reglamentario muy deseado por el mundo de la caza transalpina. La última temporada fue complicada por eso mismo y ahora en este país habrá mucho riesgo en caso de perturbación o impedimento del curso normal de los chistes.
Las sanciones previstas son una sanción pecuniaria equivalente a 30 mil euros y un año de prisión. En los últimos meses, los anti-caza franceses han sido muy activos y los episodios han demostrado ser nada menos que violentos, además de potencialmente peligrosos. Los cazadores de Francia obviamente dijeron satisfecho con el resultado obtenido, los ataques físicos ya no se podían tolerar, también porque involucraban perros.
Por cierto, no hace mucho que se han reducido cuotas anuales debido a los cazadores por la licencia y el presidente Emmanuel Macron es conocido por su pasión por la caza, especialmente a caballo. Las polémicas y disputas están ahí como en Italia., pero en este caso las medidas legislativas son más inmediatas y decisivas.