Dilatación - torsión - síndrome gástrico (GDV)
La dilatación y torsión gástrica es una condición muy potencialmente mortal para el perro. El estómago se hincha debido a una rápida acumulación de gas, se expande y gira a lo largo de su eje longitudinal, atrapando el gas en su interior. El estómago así distendido empuja contra el pecho dificultando la respiración, comprime las grandes venas del abdomen, impidiendo el retorno de la sangre al corazón.
Todo esto induce en el perro a un estado de shock muy grave que, si no se interviene con prontitud, puede provocar la muerte en dos o tres horas. Los perros en riesgo son de gran tamaño (Dobermann, Pastor Alemán, Gran Danés, San Bernardo, pero también mestizos grandes), de mediana o vejez, generalmente alrededor de los seis años. El diagnóstico de GDV suele ser simple: el dueño informa que el perro, después de comer, intentó vomitar pero no pudo hacerlo y que el abdomen estaba hinchado. Lo que se debe hacer en estos casos es llevar al perro a la sala de emergencias veterinarias más cercana lo más rápido posible.
Técnicamente, se realiza la descompresión del estómago lleno de gas, con el animal bajo anestesia, pasando un tubo por la boca del perro para intentar reposicionar el estómago y vaciarlo. La siguiente fase consiste en la llamada "gastropexia": el estómago se sutura quirúrgicamente a la pared abdominal para evitar que se retuerza de nuevo. Personalmente, siempre recomiendo, si el animal está estable, realizar la cirugía inmediatamente después de la descompresión, ya que lamentablemente en ocasiones el estómago puede haber sufrido daños y el bazo también puede haber sido afectado (en este caso el cirujano decidirá extirparlo o menos ).
El postoperatorio no está exento de riesgos para el animal; por esta razón, en general, es preferible admitir al perro en la instalación veterinaria. La causa de GDV aún se desconoce. Se identificaron los siguientes factores de riesgo: la administración de una sola comida durante el día (mejor dividir la ración diaria en dos comidas), la ingesta rápida de la comida y el ejercicio con el estómago lleno.